Las llaves de los pisos de Nuevo Amate fueron entregadas ayer a 72 familias de manos del alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido. La mayoría de los nuevos inquilinos asistieron al acto.

Hace casi cuatro años desde que empezó el proceso de renovación de la antigua barriada de Regiones Devastadas. "¿Cómo estaba aquello y cómo está ahora?", planteó Zoido al auditorio del Hogar Virgen de los Reyes, donde tuvo lugar el acto de entrega. El compromiso que adquirieron en el anterior mandato las tres administraciones -Gobierno central, autonómico y local, todos bajo gestión del PSOE- se materializó en una intervención que derribó los antiguos edificios de la barriada y luego volvió a levantarlos rebautizando la zona como Nuevo Amate. Cinco bloques nuevos de siete plantas cada uno que albergan un total de 220 viviendas.

Para iniciar el derribo y la reconstrucción los inquilinos de los antiguos pisos de propiedad municipal fueron realojados en otros, también de Emvisesa, en los barrios de Cross Pirotecnia, Los Bermejales y Pino Montano. Las familias que han decidido no volver a Nuevo Amate renegociarán con Emvisesa las condiciones para permanecer en los pisos que ocuparon, en principio, como medida transitoria.

La vuelta a casa plantea cambios respecto a la situación que había hace cuatro años, y eso ha provocado algunos recelos en los vecinos. De vivir en bloques "devastados", estos inquilinos pasan a hacerlo en casi "un palacio", como explicaba Loli Cabrera, una de las vecinas que regresa al barrio. Sin embargo, tanto esta vecina, que teme por las posibilidades de pago de los pensionistas, como otros explicaron que, además de pagar el alquiler simbólico de un euro por el piso, la luz y el agua, ahora el gasto de la cuota de comunidad será "presumiblemente más alto". "Las condiciones de las viviendas han mejorado mucho y algún gasto tiene que haber. Hay que ser responsables", afirmó Zoido haciendo un llamamiento a la colaboración de los inquilinos. Carmen Japón dijo que sabía que eso pasaría pero que ella siempre ha cuidado de su casa y de su bloque y así seguirá haciéndolo. Se trata de viviendas nuevas a estrenar y con ascensor, prestaciones que antes no tenían estos vecinos del distrito Cerro-Amate. El pago del Impuesto de Bienes Inmuebles será asumido por el Ayuntamiento, según aclararon a este periódico fuentes municipales.

La alegría por volver al barrio y la ilusión por estrenar los pisos era generalizada. "Yo estoy orgullosa con volver a mi casa y con que el Betis esté bien por encima del Sevilla", bromeaba María del Carmen Vela.

El delegado del distrito Cerro- Amate, José Miguel Luque; la delegada de Familia y Asuntos Sociales, Dolores de Pablo-Blanco; y el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Parques y Jardines, Maximiliano Vílchez, acompañaron al alcalde durante el acto, en el que Zoido se comprometió a escuchar y ayudar individualmente a cada inquilino. Los gastos y las ayudas se concretarán cuando las comunidades empiecen a funcionar. Rosalía Viñuela, de Ache Abogados, es la nueva aministradora e informó de que las comunidades ya están constituidas y de que habrá una reunión el próximo jueves para trazar un presupuesto estimativo y elegir a los presidentes. El alcalde anunció que en breve se actuará para seguir con el proceso de regeneración de esta zona.