Pediatras y expertos en vacunación califican de "injusto" y "discriminatorio" el bloqueo que desde el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad se mantiene en la distribución de la vacuna de la varicela de venta en farmacias para aquellos padres que optan por esta medida preventiva para sus hijos menores de doce años, por recomendación médica. Desde comienzos de septiembre el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla ha constatado el desabastecimiento de esta vacuna que se comercializa desde hace una década en el ámbito estatal. Se trata de un problema de ámbito nacional.

La Agencia Española del Medicamento mantiene restringida la distribución de esta vacuna en las boticas, de modo que su suministro está limitado al cumplimiento de los calendarios oficiales de vacunación, que en Andalucía fija la dosis contra la varicela a los doce años. De modo que los padres que quieren vacunar a sus hijos a los dos años, como recomiendan sociedades científicas como la Asociación Española de Pediatría o la Asociación Española de Vacunología, se encuentran con la enorme dificultad de encontrar la vacuna en las boticas. En el ámbito estatal, sólo en las comunidades autónomas de Madrid, Navarra, Ceuta y Melilla, donde el calendario oficial de esta vacuna fija su dispensación a los niños dos años, la distribución es "normal" en las boticas, confirma el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla. Esta situación provoca desigualdad en el acceso para prevenir esta enfermedad en el Sistema Nacional de Salud.

El doctor Alfonso Carmona, pediatra experto en vacunas y director médico del Instituto Hispalense de Pediatría, rechaza la restricción ministerial a esta alternativa para prevenir la varicela y recuerda que en el entorno europeo esta vacuna es accesible, lo que está provocando que familias andaluzas se desplacen, por ejemplo, a Portugal para poder comprarla. "No entendemos que dicha falta se produzca e impida a los padres que quieren vacunar a sus hijos, poder hacerlo. Somos europeos y nuestros hijos y pacientes deben poder tener derecho a la libertad de elección, y poder tener dentro de un marco de libertad ser semejantes a los de países limítrofes como Portugal, Francia, Andorra, u otros países europeos, así como en EEUU o Canadá", explica el doctor Carmona, quien entiende que "no se puede privar la libertad de prescripción del médico".

La doctora Ana Martínez, presidenta de la Asociación Andaluza de Pediatras de Atención Primaria, expresa la preocupación de "que esta limitación de acceso a la vacuna en los canales de farmacia dé lugar a problemas que no sabemos si han sido sopesados: pedidos particulares o desde consultas privadas de farmacia de comunidades con acceso a la vacuna, y administración de la vacuna fuera del canal de distribución del sistema sanitario público, con posibles defectos de distribución, conservación y registro". Para esta sociedad científica, por la misma razón que las autoridades competentes deciden primar la autonomía del paciente a la hora de no establecer un calendario vacunal obligatorio (las vacunas son opcionales), con la consecuente creación de bolsas de no vacunados que periódicamente generan brotes epidémicos, "desde la asociación creemos que puede haber un conflicto de carácter ético al prohibir de facto a los padres vacunen a sus hijos".

El presidente de la Asociación Española de Vacunología, el doctor José María Bayas, recuerda que la sociedad científica que preside remitió un escrito a la Agencia Española de Medicamentos para pedir explicaciones por esta restricción, sin recibir respuesta de momento. El doctor Bayas reitera su rechazo a que se "prohíba el acceso a la vacuna de manera privada a aquellos padres que optan por ello con prescripción de un pediatra". En EEUU esta vacuna se dispensa en edad infantil desde 1998 "y ha logrado reducir la varicela en un 85%", añade.