La Policía detiene a un violador que se fugó de la cárcel hace quince años

 El prófugo participó el pasado mes de mayo en un tiroteo entre dos familias en Valladolid y huyó después hacia Sevilla

La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a un violador que se había escapado de la cárcel hace quince años y estaba prófugo de la Justicia desde entonces. El arresto se ha producido después de que se viera implicado recientemente en un tiroteo en Valladolid, de donde huyó hasta ser interceptado en Sevilla cuando conducía una furgoneta, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía en un comunicado.

El tiroteo se produjo el pasado mes de mayo en el barrio vallisoletano de Los Pajarillos. El enfrentamiento comenzó con una pelea entre menores y terminó con un intercambio de disparos entre miembros de dos familias, con muchas personas implicadas. La reyerta se produjo la madrugada del día 11 de mayo en la calle Faisán.

Una mujer de 46 años fue alcanzada por los perdigones en un tobillo y resultó herida de carácter leve. También resultó dañado algún vehículo por impacto de los proyectiles, si bien el suceso no adquirió mayor importancia por la rápida llegada de la Policía Nacional y de la Policía Local de Valladolid. Varios de los implicados en el tiroteo huyeron del lugar de los hechos, donde se instaló durante días un fuerte dispositivo de seguridad.

La Policía identificó a todos los implicados en el tiroteo y descubrió que uno de ellos, Antonio G. B., de 62 años, tenía una reclamación judicial pendiente desde hacía casi 15 años por un quebrantamiento de condena. Este hombre se había fugado de la cárcel en la que cumplía su pena por una violación. Apenas quedaban unos meses para que prescribiera el delito por la fuga de prisión.

Una vez identificado, la Policía tenía que localizar al prófugo, algo que resultó difícil porque no había fotografías recientes de él. Además, el prófugo se había movido todos estos años utilizando una documentación falsa, por lo que tampoco era posible obtener una imagen suya de algún documento oficial, que pudiera orientar a los agentes del aspecto que este hombre tenía en la actualidad. Por ello, los investigadores tuvieron que realizar un retrato robot que sirviera para tener una idea de la imagen actual del sospechoso a raíz de la última fotografía suya conocida, de su ficha policial de hace quince años.

La Policía realizó varias vigilancias y seguimientos por la zona en la que se movía este delincuente, buscando a alguien que pudiera ser el sospechoso en función de los cambios que pudiera haber experimentado su fisonomía. Los agentes lo localizaron conduciendo una furgoneta. Lo detuvieron y lo trasladaron a las dependencias de la Policía Científica, donde fue identificado plenamente como el condenado por violación fugado quince años atrás. Ahora se le imputan tres delitos más: riña tumultuaria, por su participación en el tiroteo; falsedad documental, por el carné que llevaba; y contra la seguridad del tráfico, ya que conducía sin permiso. El detenido fue puesto a disposición de la autoridad judicial, que decretó su ingreso en prisión. La investigación ha sido llevaba a cabo por el Grupo de Atracos de Sevilla y la Policía Judicial de Valladolid.