Pocas veces unos árboles habían desatado tanta polémica. Zoido tuvo que salir ayer al paso y defender que todos los informe técnicos que fueron elaborados por Urbanismo con motivo de las obras de reurbanización que se van a desarrollar en Almirante Lobo ponían de relieve que "no había más remedio que el apeo de los árboles" que poblaban la calle. El alcalde de Sevilla argumentó también a favor de la tala que las raíces de los plataneros estaban "totalmente enroscadas" en las canalizaciones del subsuelo.

La obra, adjudicada a la empresa Carmocón con un presupuesto de 665.260 euros y un periodo de ejecución de cinco meses y medio, incluye la sustitución de las redes de abastecimiento y saneamiento de agua, las redes de alumbrado público, la renovación de las redes de cableado de semáforos, y el soterramiento de los contenedores. Por todo ello, Zoido señaló que "técnicamente no se podían conservar".

La memoria técnica del proyecto contemplaba en principio la tala de 12 de los ejemplares de plátanos de Indias y el trasplante de otros 14, si bien el alcalde puntualizó que debido al mal estado de la mayoría sólo cinco serán trasplantado y fueron talados 21. La memoria de la Gerencia también recogía que la plantación era "bastante caótica en su colación, los árboles obstaculizaban la propia ejecución de la obra, e impide las vistas de la Torre del Oro desde la Puerta de Jerez".

Tras insistir en que se plantarán 44 nuevos ejemplares de "árboles de sombra" en una calle que no ha tenido ninguna reforma en los últimos diez años, el alcalde defendió que Almirante Lobo forma parte de un "eje fundamental" para el turismo de la ciudad porque conduce el itinerario turístico de la calle San Fernando y la Puerta de Jerez hacia el rio Guadalquivir y "a la famosa Torre del Oro".