JOSÉ María, Reyes, Juan Pedro, Carmen, Javier, Gonzalo, Bosco, Jaime, María Teresa. Son los nueve hijos de Juan Pedro Delgado (Sevilla, 1971). El mayor está a punto de cumplir 12 años, edad a partir de la cual se recomienda la lectura de su novela Halcón Negro. Una historia de aventuras.

-¿Es una novela de género?

-Un amigo que estaba leyendo Guerra y Paz me dijo que la interumpió para leer mi novela. Supongo que sería para coger aire.

-¿Qué lecturas están detrás?

-Ivanhoe, de Walter Scott, Los tres mosqueteros, de Alejandro Dumas. Las de Julio Verne. Me gusta mucho El faro del fin del mundo y mucho menos De la Tierra a la Luna. Es muy técnico.

-Caballero Bonald, en 'Ágata ojo de gato', planta un normando en Doñana...

-El normando es un pueblo invasor. Empecé a escribir la novela en 1991, cuando estudiaba Periodismo en Salamanca. Estuvo muchos años metida en un cajón. Cuando volví, ya había Google.

-En Salamanca fue rector Unamuno. ¿Leyó sus novelas?

-San Manuel bueno y mártir para preparar la selectividad.

-¿Su halcón negro es pariente del halcón maltés?

-Alguien me ha dicho que me inspiré en Águila Roja, pero yo empecé mucho antes que la serie.

-¿Por qué el siglo XI?

-La Edad Media me apasiona, especialmente la inglesa. Supongo que por influencia de las novelas de Walter Scott. En mi próxima novela, El último pirata, donde ya me voy al Caribe y al siglo XVIII, homenajeo al escritor escocés. El protagonista se llama Peter Scott, llega con 33 hombres acusados de piratería a una isla para ahorcarlo y en su ropa tiene un cuaderno donde cuenta su vida.

-¿La novela juvenil de aventuras es un ensayo de la novela histórica?

-No le puedes meter muchos datos históricos porque el lector joven se te pierde. En la batalla real contra los sajones, junto a los normandos iban flamencos, bretones y franceses, pero no salen en la novela.

-Usted fundó la revista de cine Fila Siete. ¿Qué actor encarnaría al personaje de su libro?

-No se me ocurre ninguno.

-¿Viajó a esos escenarios?

-Conozco York y Harrogate, donde fui a la boda de un amigo.

-¿La literatura juvenil goza de buena salud con tanta competencia tecnológica?

-Vivimos una etapa de florecimiento de esa literatura.

-¿Fue una guerra civil?

-Fue una invasión, porque los normandos eran otro pueblo.

-¿Conocen sus hijos la novela?

-Les he contado episodios en el coche con música medieval. La está leyendo el tercero, con nueve años está escribiendo una novela sobre un niño arqueólogo. Al mayor le gusta más el cine, imita a Jack Sparrow. Ellos me han sugerido algunos nombres, como el del mesonero Maese Smith.

-¿Puede escribir con nueve niños en casa?

-Algunos creen que la novela la ha escrito mi hermano, que tiene dos niños. Cuando más estoy escribiendo es cuando más hijos y menos tiempo tengo. La clave en una familia numerosa es el orden y los horarios. A las nueve y media de la noche, en verano un poco más tarde, se acuestan, y aprovecho para leer y escribir.

-¿Antecedentes literarios?

-Mi padre tenía un quiosco de prensa en la plaza de Cuba. Los sábados me iba con él de niño y leía todos los cómics. Aparecieron las colecciones de libros en los quioscos. Me leí toda la colección del Coyote, los 96 libros.

-¿Antecedentes de aventuras?

-Tal vez mi abuelo Pedro, al que debo mi segundo nombre. Era zamorano de Puebla de Sanabria y con diez años se fue a Cuba. Regresó y en Sevilla se jubiló como cobrador de los tranvías.

-¿'La familia y uno más' es una de sus películas favoritas?

-La vamos a poner esta Navidad.

-¿Qué año prefiere para vivir, 1066, el de su novela, o 2014?

-Hay que vivir el tiempo presente, pero me fascina el pasado. He descubierto que Walter Scott nació en 1771, doscientos años antes que yo. Y publicó su primera obra histórica, Waberley, en 1814, doscientos años antes que mi Halcón Negro. Antes escribió poesía, pero apareció lord Byron y le ganaba por goleada.

-¿Qué quiere contar?

-La vida del héroe ordinario, no el superhéroe. El héroe con sus defectos, como Blas de Lezo y Olavarrieta, llamado Medio Hombre, que manco, cojo y tuerto derrotó a los ingleses. Hacen falta héroes en el mundo de hoy, está huérfano de gente que luche y se esfuerce cada día por ser mejor persona.