El Ayuntamiento de Sevilla ha destinado 4,6 millones de euros a productividades de la Policía Local en los presupuestos del año 2015. Es exactamente la misma cantidad que la fijada el año pasado y que se antojó insuficiente a mediados del ejercicio, cuando se agotó el dinero destinado a horas extraordinarias antes de llegar al verano. En las cuentas para el año que viene tampoco se incluye cantidad alguna para abonar los atrasos de 2014, ya que a día de hoy los agentes locales siguen sin cobrar las productividades de la segunda mitad del año.

Se antoja por tanto un problema similar para 2015, ya que el número de policías no sólo no ha crecido en los últimos años, sino que ha menguado. Los 103 nuevos agentes que se incorporaron en el año 2012 (cuyas pruebas de acceso siguen estando investigadas por un juzgado de Sevilla por presunto enchufismo) sólo han servido para cubrir bajas y jubilaciones, pero el número total de efectivos no ha crecido y sigue estancado en torno a los 1.200.

De esta forma, la mayoría de los turnos de fines de semana han de reforzarse con productividades. El año 2014 se celebraron varios eventos masivos que requirieron el despliegue de un amplio número de policías, la mayoría de ellos ejerciendo su actividad en horas extraordinarias. Conciertos, pruebas deportivas y salidas extraordinarias de cofradías requirieron dispositivos muy numerosos, de tal manera que el dinero disponible se agotó en el mes de junio. La salida extraordinaria de la Macarena fue el último acontecimiento masivo que pudo afrontarse con el dinero disponible, pero obligó a sacar a la calle a decenas de agentes de refuerzo.

En 2015 el panorama es idéntico, máxime cuando en este año hay una jornada electoral que obligará a doblar turnos prácticamente a todos los policías disponibles, además de los tradicionales eventos anuales como el Maratón o alguna procesión extraordinaria que ya se está organizando. La decisión municipal de destinar un dinero que se sabe de antemano que es insuficiente, cuando todavía se les adeuda una cantidad importante, ha causado un cierto malestar en el seno de un cuerpo que ya ha protestado públicamente en numerosas ocasiones por los impagos y los atrasos. A la plantilla se les adeuda aproximadamente un millón de euros en total.

El Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) en Sevilla ya está estudiando un recurso contra esta decisión municipal, al considerar que el dinero es a todas luces insuficiente, como ya se ha demostrado en 2014. Para no tener que estar atada por las productividades, la única solución para la Policía Local pasa por incrementar la plantilla. Cierto es que es una medida costosa, pero a la larga termina suponiendo un ahorro para las arcas públicas al no tener que destinar tanto dinero anual para horas extraordinarias.

El alcalde, Juan Ignacio Zoido, ya era consciente de este problema antes de su victoria en las elecciones de 2011. De hecho, uno de los pilares de su programa electoral en materia de seguridad ciudadana era la creación de 300 plazas más para la Policía Local. Con este refuerzo en la plantilla no sería necesario recurrir tanto a los servicios extraordinarios. Sin embargo, el mandato acabará con una oferta de empleo público de sólo 35 nuevas plazas (y eso gracias a que ha amortizado ocho a los Bomberos para dárselas a la Policía), que sólo permitirá que la plantilla no siga menguando.

El otro gran proyecto anunciado por el Ayuntamiento para la Policía Local era la construcción del centro de control en la Jefatura de la Ranilla. Tampoco, por el momento, se ha podido llevar a cabo. En la última edición del día de la Policía Local, el alcalde anunció que iba a empezar los trámites previos a la construcción de esta instalación. Sí se ha construido ya la galería de tiro, que ocupa una de las plantas del sótano de la Jefatura.