Los edificios de la calle Imagen han recibido la protección de la Gerencia de Urbanismo. Dichas contrucciones, emblema del desarrollo urbanístico de los años 60 y que para muchos expertos representa una de las mayores "atrocidades" cometidas en la ciudad, aparecen catalogadas en el nuevo plan de protección del subsector de la Encarnación elaborado por este departamento, al que ahora tendrá que darle el visto bueno la Junta. Otra novedad que recoge el documento concierne a la categoría otorgada al Colegio de Arquitectos, idéntica a la de algunos edificios con varios siglos, como el convento de Santa Inés o la Casa de la Motilla.

La actual configuración de la calle Imagen no ha dejado de suscitar debate desde los años 60, cuando se diseñó el aspecto que presenta actualmente. Era la época de un desarrollo urbanístico que muchos definieron como los años de la piqueta. Grandes arterias abrieron en canal el casco antiguo de Sevilla, colmatado hasta entonces de calles estrechas. Durante este tiempo no han faltado críticos y defensores de esta manera de entender el planeamiento urbano. Para muchos, esta vía supone un claro referente del movimiento racionalista. Para otros, constituye el mejor exponente de lo que no debe hacerse al no respetar la configuración heredada de la historia. De hecho, muchos expertos la contraponen con la calle Mateos Gagos, otro ejemplo de "apertura" urbanística que poco tiene que ver con la de Imagen.

La Gerencia de Urbanismo ha dado un paso al frente en el debate y ha catalogado los edificios que componen esta arteria con el nivel C dentro del plan de protección del subsector de la Encarnación. Dicha clasificación corresponde, según el citado documento, a "edificaciones cuyos valores arquitectónicos, artísticos y etnológicos no alcanzan el carácter singular de las edificaciones monumentales, pero que por sus características arquitectónicas originales, su pertenencia a una tipología protegible, su singularidad dentro de la trama urbana del subsector o su significación en la historia de la ciudad deben ser objeto de protección".

Las de la calle Imagen están catalagados como "edificaciones contemporáneos". En este concepto se incluyen aquéllas construidas a partir de los años 50 del siglo XX, que responden básicamente a una "concepción racionalista", tanto en su interior como en su respuesta al espacio urbano, por lo que el plan de protección entiende que son "piezas de gran interés por su modernidad e impronta en la ciudad". En concreto, reciben la protección de nivel C ocho edificios de la calle Imagen y el número 26 de Doña María Coronel.

Otra de las novedades que aporta el plan de dicho subsector es la catalogación otorgada al Colegio de Arquitectos, cuya construcción también generó numerosas polémicas a mediados de los 80 por suponer una clara ruptura con la configuración clásica de la Plaza del Cristo de Burgos. Este edificio cuenta ahora con la protección B, un nivel idéntico al de la Casa de los Marqueses de la Motilla (en la esquina con Cuna), la Iglesia y Hospital de la Misericordia, los conventos de las Hermanas de la Cruz y Santa Inés así como la Antigua Audiencia Provincial.

En cuanto al proyecto Metropol Parasol, aunque la Gerencia no le concede una protección específica, sí lo menciona a la hora de describir la Plaza de la Encarnación como un espacio de gran importancia en el subsector. Según la asociación conservacionista Adepa, dicha inclusión en la configuración le otorga ya una cierta protección que preserva al conjunto diseñado por Jürgen Mayer de un posible intento de alteración o demolición.