La Fiscalía de Sevilla pedirá a partir de este lunes una condena de 20 años de cárcel para Jonathan Silva Bruno, apodado Yoni el Prestamista, por el asesinato Francisco Javier Gómez, el Muñeco, al que atropelló "brutal y deliberadamente" en la avenida de Montes Sierra el 22 de febrero de 2014 tras un incidente producido en un bar.

Yoni el Prestamista, que está en prisión desde que ocurrieron los hechos, será enjuiciado por un jurado popular en la Audiencia de Sevilla. El Ministerio Público, que además de la pena de cárcel reclama una indemnización de 300.000 euros para los familiares del fallecido -entre ellos dos hijas gemelas menores de edad-, recuerda que previamente al atropello se produjo un altercado en el bar La Trocha de la avenida de Montes Sierra, donde se hallaban el acusado y la víctima.

El Ministerio Público explica en su escrito de conclusiones provisionales que Francisco Javier Gómez, elMuñeco, se hallaba en un "lamentable estado de intoxicación" -por el consumo de alcohol y drogas-, y en un momento dado se puso a "molestar" a las personas que estaban en el local, lo que motivó que fuese expulsado sobre las 7:24 de la mañana. La víctima, "furiosa" por su expulsión, regresó a los dos minutos con una botella de cristal en la mano y comenzó a aporrear la persiana metálica al tiempo que daba grandes voces para que le abrieran.

Francisco Javier golpeó con la botella a Jonathan Silva, que sufrió un corte, y a continuación intervinieron el portero del local y el dueño para separarlos.

Francisco Javier Gómez, como estaba en inferioridad numérica, huyó corriendo por la avenida de Montes Sierra hacia el centro comercial de Los Arcos, en dirección completamente opuesta al local donde ocurrió la trifulca.

Pero el Prestamista, según la Fiscalía, "en venganza por lo sucedido", decidió salir en persecución de la víctima conduciendo su propio vehículo, un Seat Altea que tenía aparcado frente al bar.

Le acompañaban el portero y el dueño, que creían que Jonathan se dirigía la hospital para que le curaran las heridas, pero el acusado comenzó a seguir a la víctima y decidió "embestirla", para lo cual desvió su trayectoria de forma oblicua diez metros y se subió a la acera, circulando por encima de la misma y en línea recta durante 26 metros, distancia en la que fue acelerando "buscando con ello causarle la muerte o pudiendo racionalmente prever que ésta se produciría necesariamente tras el brutal atropello".

Sus acompañantes le rogaron con insistencia que se detuviera, pero finalmente Yoni el Prestamista lo arrolló "deliberadamente cuando se encontraba desprevenido caminando por la acera, pasándole el vehículo completamente por encima", con lo que el joven falleció en sólo tres minutos.