El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, realizó ayer una visita privada a la Torre Pelli y horas más tarde envió una nota a los medios de comunicación para anunciar que las obras estarán terminadas "en un plazo aproximado de quince días". Una vez concluida la construcción, la inauguración no es inmediata. Antes debe tramitarse la licencia de ocupación de la torre en el Ayuntamiento.

La empresa promotora del rascacielos -la sociedad Puerto Triana participada mayoritariamente por Caixabank-, sin embargo, prefiere evitar hablar de plazos de finalización de obra, responde que no dirán nada "hasta que esté todo terminado" y que enviarán una nota de prensa con todos los detalles en su momento, según declararon ayer fuentes de Puerto Triana a este periódico.

Zoido estuvo acompañado por el director territorial de Caixabank en Andalucía Occidental, Rafael Herrador, y el delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez, y comprobó que los trabajos están muy avanzados y se encuentran en su fase final. Según la nota enviada a la prensa, "está previsto que (las obras) finalicen durante este mes de marzo".

El alcalde había pedido visitar la torre de forma privada y lo hizo recorriendo las instalaciones de la misma junto a Herrador, Vílchez y responsables de la constructora, quienes le han confirmado que "los trabajos se encuentran en su recta final y en un plazo aproximado de quince días estarán terminados, por lo que de manera inmediata podrán entregar toda la documentación necesaria en la Gerencia de Urbanismo". 

El regidor municipal aseguró que "una vez que esté toda la documentación presentada, la Gerencia de Urbanismo concederá la licencia de actividad con la máxima celeridad y diligencia". Zoido recalcó que el rascacielos de la Cartuja es "una gran ocasión para que en Sevilla se sigan incrementando las oportunidades y generando riqueza y mucho más empleo en una zona tan importante como es el complejo de la Torre Pelli".

Aparte del rascacielos, el proyecto de la Torre Pelli seguirá ejecutándose en el llamado edificio podio, que arranca de la base del rascacielos. En este punto precisamente irá el Caixafórum de Sevilla, un centro social y cultural de 7.500 metros cuadrados útiles que requiere uno o dos años más de obras. Ofrecerá al visitante dos salas de exposiciones, un auditorio, dos aulas polivalentes, un bar-restaurante y una tienda-librería. El proyecto ha sido diseñado por el arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra. El Caixafórum finalmente irá en este punto de la Cartuja tras descartarse oficialmente su construcción en las Atarazanas del barrio del Arenal.

La apertura de la Torre Pelli pondrá en el mercado una amplia oferta de oficinas en la capital. Caixabank inició en febrero la comercialización de espacios para oficinas de la planta 1 a la 24 con el eslogan "espacios en un edificio moderno y singular, situado en uno de los mejores enclaves de Sevilla", según reza la campaña de publicidad iniciada en los medios de comunicación. En las plantas más altas no irán oficinas, ya que está prevista la instalación de un hotel. Según Caixabank, se comercializan 1.500 metros cuadrados por planta, destinados a oficinas, siendo el módulo mínimo de 200 metros cuadrados. El total de metros cuadrados que ha salido al mercado es de 35.000. El precio de cada alquiler se cierra en una operación personalizada.

El plan de tráfico de esta zona de la Cartuja es una de las cuestiones que aún no están resueltas y que resulta urgente una vez que entre en servicio la Torre Pelli. El Ayuntamiento de Sevilla asegura que la única solución es un nuevo puente para el tráfico a la altura del Pabellón de la Navegación, un paso elevado que en su día se diseñó únicamente para peatones y bicis y cuyo uso ha cambiado Zoido. La patronal de constructores y promotores de Sevilla apoya al alcalde y reivindica que el puente es urgente.

El problema de este nuevo puente de la Cartuja es que la Junta de Andalucía se opone a autorizarlo, y es la administración andaluza la que tiene la última palabra en este asunto por ser la competente, ya que para convertir el puente originalmente peatonal en uno que acoja tráfico rodado hay que reformar el Plan General Urbanístico (PGOU) de la ciudad. 

El Ejecutivo de Susana Díaz ha reiterado que esta infraestructura que persigue Zoido "no está justificada y contraviene los planes de la zona". Los grupos de la oposición municipal en el Ayuntamiento (PSOE e IU) apoyan la tesis de la Junta y defienden que el puente no es prioritario y que saturará Torneo aún más, por lo que reclaman un plan de tráfico para la zona que potencie el transporte colectivo y público.