El sonido de las ruedas de las maletas arrastradas por los turistas se entremezcla con la música de capilla que se escapa del interior de los templos. El desembarco de visitantes fue continuo a lo largo del día de ayer, y aún faltan por llegar. La Asociación de Hoteles de Sevilla y Provincia (AHS) subrayó ayer que se han alcanzado ya unas reservas del 85% de cara a la Semana Santa, lo que supone una ocupación mayor que la experimentada el año pasado, cuando se llegó al 77%. Este dato, que se eleva incluso más en los hoteles de mayor categoría, es "positivo" para el turismo del destino Sevilla y marca "una continuidad en la buena tendencia que se está teniendo en 2015 en cuanto a datos de ocupación hotelera".

El principal ingrediente para estas buenas previsiones es el tiempo primaveral con el que contará la ciudad a lo largo de toda la semana, ya que el mercurio bordeará los 30 grados en la mayoría de los días. Los hoteleros observan una "cierta mejoría" en los precios de los alojamientos turísticos. Es más, resaltan que, si el año pasado fue la categoría hotelera de tres estrellas la que obtuvo mayor nivel de ocupación, este año son los hoteles de cinco estrellas los que alcanzan una ocupación mayor (como ya ocurrió en 2013). La noche de mayor precio y ocupación es la del Viernes Santo, cuando casi se roza ya el lleno total en Sevilla.

"A día de hoy, las reservas hoteleras se encuentran siete puntos por encima de las del año pasado. Del Jueves Santo en adelante quedan muy pocas habitaciones, estamos muy satisfechos", señaló Gregorio Serrano, concejal de Turismo. Desde el Domingo de Ramos hasta el Miércoles Santo, el porcentaje de las habitaciones ocupadas roza el 85% -frente al 70% que se consiguió en 2014-. Estas cifras crecen en el segundo tramo de la semana (desde el Jueves Santo hasta el Domingo de Resurrección) la ocupación se dispara y en muchos establecimientos ya se ha colocado el cartel de completo. La asociación hotelera destacó que aún quedan habitaciones libres para disfrutar de la Semana Santa, sobre todo en la primera mitad de la semana, y por eso espera que las reservas de última hora puedan aumentar en estas jornadas que quedan hasta el Domingo Ramos, ya que "el buen tiempo va a acompañar y eso es bueno para que vengan a visitarnos".

Se mire en la dirección en que se mire, es prácticamente imposible encontrar una calle mínimamente céntrica de Sevilla sin turistas. Los hosteleros y comerciantes se frotan las manos. Bares y restaurantes ultiman los preparativos para esta semana, en algunos casos reducen los platos de sus cartas para facilitar la labor de los cocineros y en otros preparan sus locales para la venta de bocadillos desde una barra de metal. No fueron pocos los empresarios que compartieron la queja contra las licencias temporales concedidas a puestos de algodón, churros y otros provisionales en sitios donde el Ayuntamiento ha quitado veladores para estas fiestas. "Es un sinsentido recortar veladores y poner puestos que hacen competencia desleal a bares porque venden bebidas también", lamenta el dueño de un céntrico bar de tapas. Otro añade como segunda queja del sector que "este año ha habido un aumento de comercios con otra actividad dedicados a la venta de bebidas y bocatas".

Los precios por habitación llegarán en la ciudad a los 222 euros para la noche del Jueves Santo, siendo la media de la semana en 204. Para la llegada de los visitantes tanto Renfe como las compañías aéreas aumentaron su oferta. En el Aeropuerto de San Pablo los vuelos serán 1.073 y los asientos 172.340. Las jornadas con más vuelos serán el Miércoles Santo (111) y Jueves Santo (110). El Metro reforzará su oferta habitual un 50% desde mañana.