"Reconozco los hechos atribuidos a mí", unos "hechos deplorables por los que pido perdón a la ciudadanía de Marbella". Por varias veces admitió ayer el abogado José María del Nido los hechos de los que se le acusan en el caso Fergocon -en presuntas irregularidades cometidas en la contratación de obras que el Ayuntamiento de Marbella realizó entre los años 2001 y 2002- y hasta en dos ocasiones, al inicio y al final de su declaración ante el Tribunal que lo juzga desde ayer, pidió perdón por ello. 

Han pasado más de cinco años desde que Del Nido se sentó en el banquillo de los acusados por el caso Minutas, por el que cumple una pena de cárcel de siete años y

medio, y su actitud y manera de proceder ayer dictó bastante de las vistas que durante 2010 se celebraron también en la Audiencia de Málaga. Junto a Del Nido, en el juicio por el caso Fergocon que se inició ayer en la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Málaga, están imputados Julián Muñoz, dos hermanos de Del Nido y otras ocho personas más, acusadas de los delitos de fraude en la contratación, malversación de caudales públicos, falsedad documental y prevaricación. 

Más sosegado que entonces, y haciendo referencia a los demás casos relacionados con la trama de corrupción que durante años se continuó en el Ayuntamiento de Marbella y a las sentencias firmes de Supremo que así lo demuestran, Del Nido explicó que través de una serie de sociedades municipales se aprobaron unas obras "que no podían ser", unos trabajos que llevaban aparejado "un sobrecoste de entre el 10 y el 15%," y de los que reconoció que llegó a percibir "una tercera parte, en torno a 100.000 o 150.000 euros". 

Durante su declaración, el que fuera presidente del Sevilla, quiso dejar claro que su hermano Oscar "se dedicaba a la construcción" y que lo que se hizo fue ofrecerle que cobrara, a través de la empresa Fergocon, "una serie de honorarios profesionales, que no se podían de esa manera". Del Nido explicó que se decidió actuar de este modo para canalizar sus retribuciones profesionales por otras vías, por sociedades municipales, dados los reparos realizados por el interventor en el Ayuntamiento, primero verbalmente y luego con un informe. 

Sobre el sobrecoste de los trabajos realizados para el Ayuntamiento, Del Nido concretó que era su hermano el que le entregaba un sobre con la cantidad y él la repartía entre el alcalde, la parte que iba para su propio bolsillo y una tercera "que se quedaba en Fergocon". Ante las preguntas insistentes del fiscal matizó que en 2001 los pagos se los realizó a Jesús Gil y en 2002 a Julián Muñoz. Del Nido contestó únicamente a las preguntas del Ministerio Fiscal y a las de su defensa.

Con lo que no está de acuerdo el que ex jefe de los servicios jurídicos del Ayuntamiento marbellí es con la pena de 11 años de cárcel que le solicita la Fiscalía Anticorrupción. Así, su abogado alegó durante las cuestiones previas al juicio dilaciones indebidas y acusación sorpresiva por el delito de malversación, lo que le causa una indefensión en la medida en que no se le interrogó por ese delito durante la primera parte de la instrucción. 

Al igual que otras defensas también aludió a la conexión con el caso Minutas, por la que ya ha cumplido 18 meses de condena. El fiscal le recordó lo único que hay es una coincidencia temporal, en un momento en que se desarrollaba una trama organizada criminal en el Ayuntamiento de Marbella, por lo que no se puede atender a un hecho ya juzgado.

Muñoz también adelantó ayer que reconocerá los hechos, pero tampoco está de acuerdo con la pena, mientras que su abogado precisó que hará matizaciones cuando declare. Los hermanos de Del Nido y otros dos acusados se pronunciaron en los mismos términos.

Fergocon SA fue una sociedad mercantil que se constituyó a finales de 2000 y, según consta en las as conclusiones provisionales de la Fiscalía Anticorrupción, se hizo con "con el fin prioritario y prácticamente exclusivo de realizar obras para el Ayuntamiento de Marbella, así como canalizar el traspaso de bienes de propiedad municipal a favor de la familia de Del Nido y de Julián Felipe Muñoz Palomo". El Ministerio Público considera que "los verdaderos artífices y propietarios de la sociedad" eran José María del Nido y sus dos hermanos -Óscar Luis y Juan José-, y que eran ellos quienes tomaban las decisiones. 

El fiscal acusa a Muñoz y Del Nido de adjudicar a ambas empresas obras y servicios públicos "de forma directa y verbal", sin que las contrataciones pasaran por el Pleno del Ayuntamiento y sin publicidad ni licitación pública. Al primero en su condición de alcalde accidental y al segundo por "como artífice y director" de las decisiones que se tomaban en la administración local, no solo en la vertiente jurídica -era el jefe de los servicios jurídicos del Ayuntamiento-. Tras la adjudicación se procedía a "la aparente ejecución", pues fue en la realización "donde se produjo un desvío de capitales públicos a manos privadas".

Para los dos principales acusados el fiscal pide 11 años de prisión, 3 por fraude en la contratación y 8 por malversación de caudales públicos, falsedad en documento oficial y prevaricación. A los dos hermanos de Del Nido les solicita penas algo más bajas, de 10 años y medio para Oscar Luis y de 10 años para Juan José.