Sin industria no hay futuro. Ése es el subtítulo del documento elaborado por empresarios y sindicatos para propiciar un proceso de reindustrialización en la provincia de Sevilla apostando por la reconversión y la modernización de los modelos industriales para adaptarlos a las necesidades del mercado actual. La Confederación de Empresarios de Sevilla (CES) y los sindicatos CCOO y UGT presentaron este martes a Juan Espadas la iniciativa Sevilla (en)clave industrial, un texto que arranca con una descripción del panorama actual y define las carencias y las necesidades de todos los sectores industriales.

"Tenemos que lograr que la industria suponga el 20% del PIB de la provincia en los próximos años". Con esta frase, Antonio Montero, secretario general de los empresarios sevillanos, presentaba a los medios el proyecto que minutos después dio a conocer al alcalde junto al presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, la subdelegada del gobierno en Andalucía, Felisa Panadero, y diputados provinciales, autonómicos y nacionales de todos los partidos políticos.

Puleva, Roca, Danone o Cargill. Son sólo algunos de los ejemplos de las fábricas que ha perdido Sevilla desde que se inició la crisis. En siete años el tejido industrial sevillano se ha reducido más de un 25%, lo que debilita aún más este sector, que ya antes de que se iniciara la debacle económica tenía una pírrica representación en la provincia. Esta marcha ha creado una imagen de desierto industrial poco favorable para atraer nuevas inversiones. Las políticas que se han puesto en marcha por parte de las distintas administraciones para cambiar este rumbo han tenido poco éxito hasta ahora, de ahí que sean los empresarios y sindicatos los que hayan decidido tomar el timón para frenar dicha tendencia.

"Abandonemos nuestra tradicional indolencia y pongámonos manos a la obra, buscando nuevos modelos productivos en torno a sectores con peso específico y con gran capacidad de generar puestos de trabajo". Los empresarios adelantaron durante la jornada celebrada en el Hogar Virgen de los Reyes que técnicos, empresas y trabajadores debatirán a lo largo de este mes los principales problemas que afectan al sector. "Estamos en el momento adecuado para huir del conformismo y el pasotismo que ha imperado entre nosotros y propiciar el resurgir de una sociedad con nuevas ideas, renovadoras y valientes", señaló Montero. Los empresarios solicitan un plan estratégico que permita aprovechar los más de 5.600 millones de euros de fondos europeos que recibirá Andalucía de Europa en el período 2014-2020.

El peso de la industria provincial es modesto, tanto en comparación con otros sectores productivos como con otras zonas de España. Entre 2000 y 2011 la aportación del sector industrial al Valor Añadido Bruto provincial, según el INE, pasó del 18% al 14%, mientras que los servicios ascendieron del 68% al 72%, y ese mismo año 2011 la agricultura representó el 4% y la construcción el 10% del VAB de la provincia. En los dos últimos años, aunque ha habido un repunte por la consolidación de la producción aeronáutica y minera, han cerrado plantas de dilatada trayectoria y atraviesan dificultades otras que durante décadas han sido emblemas industriales de Sevilla. "Tenemos que pasar del diagnóstico a la acción. Necesitamos ambición y un pacto por el territorio. Es un golpe de ilusión", destacó el alcalde socialista.

Aunque la percepción es que la provincia sigue perdiendo fuerza industrial, "se atisba una leve recuperación. Tenemos todos los ingredientes para el despegue necesario". Esta misma idea de Alfonso Vidán, secretario general de CCOO en Sevilla, es compartida por su homólogo de UGT, Juan Bautista: "Necesitamos el compromiso de todas las entidades para desarrollar un documento muy ambicioso".