Un empresario ha sido condenado a una pena de dos años y cuatro meses de cárcel, al pago de una multa de 200.000 euros y a tres años y medio de inhabilitación por la muerte, por electrocución, de uno de sus trabajadores, acaecida en 2011 en Sevilla, según ha informado este miércoles CCOO en una nota. 

El juzgado número 10 de Sevilla ha considerado al acusado culpable de los delitos de homicidio imprudente y contra los derechos del trabajador, por lo que le ha impuesto una pena de un año y seis meses de prisión por el primero, y diez meses de cárcel por el segundo, además de la ya mencionada indemnización a la familia y los tres años de inhabilitación en su profesión. 

Desde CCOO han destacado que esta sentencia refleja que el condenado "no puso en práctica las medidas indicadas por el técnico en la prevención de riesgos laborales para garantizar la seguridad de la instalación eléctrica" en la que se electrocutó su empleado "ni procuró la formación e información necesaria ni al trabajador fallecido ni a ningún otro". 

Este sindicato, que se personó como acción popular en el proceso judicial, ha destacado la "importancia" de la sentencia, pues es "la primera de esta categoría" que se dicta en Sevilla y porque "marca un antes y un después y abre la puerta a que los empresarios paguen por las negligencias que cometen y que, en ocasiones, incluso cuestan la vida a los trabajadores".