La necesidad de un nuevo modelo de financiación pública y la urgencia de recuperar las posiciones perdidas este año por la Hispalense en el ranking internacional de universidades marcaron ayer el acto de apertura oficial del curso académico de la Universidad de Sevilla 2016/2017, cuya lección inaugural corrió a cargo de la catedrática de Filología Latina Concepción Fernández. El rector, Miguel Ángel Castro, señaló que hay que seguir creciendo en investigación de referencia y en internacionalización.

En declaraciones a la prensa antes de comenzar el acto, Castro señaló que el nuevo modelo de financiación pública que el Gobierno andaluz prevé para 2017 debe cubrir la actividad docente (número de estudiantes, de títulos y de instalaciones) y sumar un complemento adicional en función de los méritos en productividad científica y transferencia del conocimiento. "Ese complemento debería de ser proporcional a los méritos que las universidades van obteniendo; deberíamos comprometernos a unos objetivos y rendir cuentas de que los estamos cumpliendo para que la financiación se siga incrementando", insistió. Esta financiación vinculada a la producción científica mejorará la posición de las universidades andaluzas en los rankings internacionales, explicó el rector.

En la actualidad, la Hispalense cuenta con una comunidad de 80.000 personas entre alumnos, profesores y personal administrativo y recibe una financiación pública de 423 millones de euros que dan para lo justo. Para lograr una parte importante de financiación propia, la Universidad de Sevilla está catalogando su valioso patrimonio artístico con vistas a organizar visitas guiadas y ofrecer material audiovisual, como ya hacen las universidades europeas con más historia. "Queremos ser un gran escaparate de la ciudad. El patrimonio de la Universidad es similar al de las grandes universidades europeas que reciben una parte importante de fondos sólo a través de las visitas guiadas, y de las expresiones audiovisuales que se hacen de este patrimonio artístico. Esa es la línea para captar más fondos".

Del ranking internacional le preocupa que la Universidad de Sevilla haya invertido la tendencia de mejora en la posición que venía ocupando en los últimos años. "Pese a que en 2016 crecimos en publicaciones y productividad científica respecto al año anterior, otras universidades han crecido más que nosotros y eso está relacionado evidentemente con la financiación y con los procedimientos para poder desarrollar la investigación", apuntó.

Sobre la Selectividad, transmitió serenidad a los alumnos de segundo de Bachillerato porque en Andalucía se ha aprobado realizar una prueba de acceso a la Universidad similar a la que venía realizándose y cumpliendo el Real Decreto, "porque yo espero que aquí siempre cumplamos las normas". Pero espera que a nivel nacional se recupere la idea de una prueba única de acceso, que es la que iguala a los ciudadanos y permite que elijan la universidad donde quieren estudiar.

La Hispalense inicia el curso con 74.000 alumnos y 4.120 profesores, 83 titulaciones de Grado, 92 másteres y 92 programas de doctorado. En investigación, cuenta con casi 520 grupos, 464 patentes, y participación en el Campus de Excelencia Andalucía Tech.

El rector llamó "al trabajo, al rigor y a gastar las energías hacer una sociedad mejor, que es la función fundamental de la universidad", y agradeció al alcalde Juan Espadas su cercanía.