La incertidumbre de un mercado laboral marcado por la precariedad ha llevado a que generaciones de profesionales sanitarios miren hacia fuera de España, especialmente hacia países europeos, para buscar un futuro. Adrián, María, Álvaro o Sofía son testimonios de esta fuga de especialistas formados en universidades públicas, que aspiran a un puesto de trabajo prometedor en Alemania motivados, en gran medida, por la falta de oportunidades, en Sevilla y, en general, en España. Todos cursan alemán de manera intensiva en el Aulario Sevilla de la calle San Luis. Seis horas diarias para lograr el B1 de alemán; y para aspirar posteriormente al B2 de este idioma, un nivel que les permitirá, en la mayoría de los casos, convalidar sus títulos académicos y ocupar un puesto de trabajo indefinido remunerado de acuerdo a sus capacidades.

Al Aulario de San Luis acuden diariamente 13 alumnos, sevillanos y también procedentes de otros puntos de Andalucía y de España, que integran la primera promoción sevillana que ha optado por Profco, una agencia alemana dedicada, entre otros cometidos, a reclutar a profesionales sanitarios (enfermeros, fisioterapeutas y farmacéuticos) para formarlos en el idioma e introducirlos en el mercado sanitario alemán, mediante convenios con los centros de trabajo alemanes.

La Agencia Profco dice ser "muy consciente de que la cualificación adquirida en universidades españolas se sitúa en uno de los niveles más altos de Europa y así se reconoce también en Alemania". Según esta firma germana, la oferta prevista de plazas en centros sanitarios para los próximos años en Alemania no cuenta con los suficientes trabajadores germanos. En 2014 un estudio realizado por el Institut für Public Health und Pflegeforschung de la Universidad de Bremen señala la necesidad de incorporar en los próximos cinco años alrededor de 500.000 enfermeros al mercado alemán. El déficit de profesionales en países europeos como Alemania o Inglaterra, unido a las necesidades de profesionales españoles altamente cualificados, que no encuentran en el ámbito estatal posibilidades de un trabajo digno, ha generado un nicho de mercado. "Cada vez surgen más empresas dedicadas a la mediación entre jóvenes españoles muy cualificados para que trabajen en otros países y empresas fuera de España", explica José María Rueda, presidente del Colegio de Enfermería de Sevilla.

A través de la agencia alemana Profco, la primera promoción formada en alemán en Sevilla tiene previsto partir en octubre destino Bremen, donde aspiran a ocupar un puesto estable a partir de enero del próximo año. Entre sus candidatos se encuentra Adrián Gómez que, a sus 22 años, se ha formado en Fisioterapia en la Universidad de Sevilla y quien reconoce que "trabajo hay" en su sector en Sevilla, pero lamenta el elevado índice de precariedad. "Es cierto que compañeros que han terminado la carrera, en el plazo de tres meses, han encontrado trabajo, pero es de muy poca calidad: o bien son puestos a tiempo parcial, o bien las empresas te exigen darte de alta como autónomo para poder trabajar". La propuesta alemana es "un trabajo indefinido, estable, a tiempo completo y un sueldo digno", destaca este joven fisioterapeuta. Similar es la opinión de su compañera Sonsoray, de 26 años, natural de Alcalá de Guadaíra, que también se ha embarcado en el proyecto alemán. "Tengo grandes expectativas, aunque salir de España no entraba en mis planes cuando comencé a estudiar Fisioterapia", reconoce.

El profesor del grupo, Israel Bernal, interrumpe por unos instantes el curso intensivo de alemán. "La crisis me ha facilitado trabajo en estos años", comenta este sevillano, docente de alemán, con familia arraigada en el país germano. "Es muy curioso, pero además de alumnos jóvenes que buscan un trabajo en Alemania, a través de talleres de ayuntamientos que imparto, me han llegado personas de unos 50 años, que desean aprender Alemán porque sus hijos han emigrado para trabajar y necesitan desenvolverse con el idioma.

Sofía Oyonarte, Juan Manuel Usero e Inmaculada Quintero son naturales de Granada y residen en Sevilla unos meses para acudir al curso que imparte el profesor Bernal. Son farmacéuticos. "Por las condiciones de trabajo" es el motivo que ha lanzado a Juan Manuel y a sus compañeras a Alemania. "He trabajado como auxiliar de farmacia, pero las condiciones de trabajo... aquí estamos menos recocidos, mientras que en Alemania nos garantizan seis meses de prueba y un contrato indefinido", explica este joven. Sofía Oyonarte aspira a un puesto en un laboratorio como farmacéutica, pero "en España un máster, que es necesario para trabajar en el sector, supone en torno a unos 10.000 euros", reseña. A Inmaculada Quintero le prometieron un puesto como farmacéutica en su municipio, Puente Genil, pero "me dijeron que tenía que permanecer trabajando gratis cuatro meses", lamenta.

Elizabeth Rodríguez es enfermera natural de Perú y residente, desde hace años, en Sevilla. "Al entregar el currículum en la bolsa de trabajo del SAS me explicaron que tenía que esperar, al menos, dos años, para que me llamaran para un contrato de pocos días", explica. "Piden experiencia pero no dan la oportunidad para trabajar, mientras que trabajar en un hospital público europeo me permitirá tener puntos en bolsas como la del SAS", añade.

Marta Bejarano, enfermera sevillana de 27 años, actualmente trabaja en Airbus. "Regresé a Sevilla tras permanecer dos años en Alemania como enfermera, el idioma y la experiencia me han abierto el camino; aunque fue duro", explica. Al terminar Enfermería con 22 años Marta entró en la bolsa del SAS en plena crisis. En tres años apenas logró trabajar un mes. Cogió su maleta y se lanzó, sin conocer el idioma, a buscar un futuro. "Fue duro, pero repetiría la experiencia", concluye.

José María Rueda. Presidente del Colegio de Enfermería de Sevilla: "Unos 500 enfermeros sevillanos se fueron en 2015"

"En torno a unos 500 enfermeros sevillanos se fueron fuera en 2015 para optar a un puesto de trabajo, especialmente a Irlanda y a Inglaterra, y en menor medida a Alemania", explica José María Rueda, presidente del Colegio de Enfermería de Sevilla. Esta realidad que lleva a la emigración masiva de profesionales formados en el sector sanitario, que son muy valorados en países europeos, tiene "su vertiente positiva y su vertiente negativa", reflexiona el presidente de los enfermeros sevillano. "Lo positivo es que el hecho de trabajar en otro país de la UE supone una experiencia muy enriquecedora para los titulados, tanto por el aprendizaje y manejo del idioma, como por el conocimiento de otro sistema sanitario; lo negativo reside en la pérdida que supone para nosotros que se marchen profesionales muy cualificados y muy valorados en otros países, que se han formado en gran medida gracias a fondos públicos que salen de los impuestos de los españoles. Otros países, que no han invertido en su formación y cualitificación, se benefician, como es el caso de Alemania y otros destinos". Ante la fuga de profesionales sanitarios, que se ha intensificado  de manera notable durante los años de la crisis, han surgido nuevas empresas dedicadas a intervenir a modo de intermediarios entre los titulados y los hospitales o centros que necesitan mano de obra. "Al Colegio de Enfermería llegan cantidad de empresas que han surgido como setas", asevera José María Rueda. La institución colegial recomienda a los jóvenes que acuden a otros países en busca de un puesto que opten por aquéllas opciones que están garantizadas por organismos públicos.

Raquel Chillón. Vicepresidenta del Colegio de Fisioterapeutas de Andalucía. "La pérdida de colegiados se ha multiplicado por diez"

"Los fisioterapeutas son los alumnos con los expedientes más competitivos, pero muchos tienen que irse fuera ante el déficit de plazas públicas y el grave problema de intrusismo que sufrimos en el sector privado", explica  Raquel Chillón, vicepresidenta del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Andalucía. La institución profesional que representa a los fisioterapeutas andaluces ha registrado un destacable aumento, en los últimos años, en las bajas tramitadas por colegiados que se han ido a trabajar a otros países. "Son más los fisioterapeutas que buscan un puesto de trabajo fuera de España, pero a modo de indicador el número de bajas en el Colegio de Fisioterapia de Andalucía se ha multiplicado por diez entre 2005 y 2015", explica Raquel Chillón. De modo que si en 2005 se contaron cinco bajas, durante el pasado año fueron 50. "Muchos fisioterapeutas que se licencian  ni siquiera se colegian en Andalucía porque directamente, tras obtener el título, se marchan fuera para buscar un trabajo", añade.  La vicepresidenta del Colegio de Fisioterapeutas de Andalucía  lamenta la marcha de profesionales brillantes a causa de la falta de expectativas laborales. La formación de un universitario puede suponer a las arcas públicas en torno a 10.000 ó 12.000 euros. "En la Facultad Fisioterapia se registra una elevada demanda de estudiantes, pero las plazas son deficitarias en el Servicio Andaluz de Salud, pese al creciente volumen de personas que requieren de esta asistencia; entre ellos niños que necesitan fisioterapia, enfermos crónicos o personas mayores", añade. En este sector asistencial, los servicios privados "siempre han tenido gran peso, pero el problema es el elevado intrusismo que padecemos", añade la vicepresidenta de los fisioterapeutas.

Alberto Amador. Portavoz de Médicos de Postgrado en el Colegio de Médicos de Sevilla: "Se producirá un preocupante déficit de médicos en un lustro" 

"Las promociones de médicos entre los años 2009 y 2016 prácticamente se han ido a trabajar a otras comunidades o, a otros países. Con el volumen de jubilaciones que se espera en los próximos cinco años no habrá suficientes médicos para cubrir ni en el sistema público ni en el privado. Se han ido promociones enteras de médicos y se producirá un déficit, tenemos antecedentes en Inglaterra, que ha atraído con contratos muy atractivos a muchos médicos sevillanos", explica Alberto Amador, responsable del área de Médicos de Postgrado y Promoción del Empleo en el Colegio de Médicos de Sevilla, quien califica de "preocupante" la masiva fuga de médicos. Para Alberto Amador, como portavoz de los recién titulados, "el problema hoy en día en el sector no es la falta de puestos de trabajo, que existen, sino la enorme precariedad: trabajos temporales de muy corta duración (meses, semanas e incluso de días) en el sistema sanitario público; mientras que en el sector privado la precariedad laboral está marcada por nóminas bajas y por condiciones que nos obligan a darnos de alta como autónomos o a crear una sociedad para poder trabajar", lamenta. "Un médico puede simultanear cuatro contratos". Es esta situación la que lleva a los médicos recién titulados a mirar hacia fuera de España, especialmente a EEUU, Canadá, Irlanda o Inglaterra, donde las condiciones laborales y los centros de investigación son más atractivos para profesionales que desean avanzar. Amador recuerda que la formación de un médico especialista requiere de once años. "Hay una generación pérdida de médicos; y es preocupante que el relevo generacional necesario por el alto grado de jubilaciones, que se espera para los próximos años, no cuente con candidatos suficientes", advierte.