Sevilla

'Oficialistas' y 'críticos' se enfrentan por el uso de un edificio municipal

  • La portavoz del gobierno avala que los trabajadores ocupen hoy la sede de Diego de Riaño tras garantizar la seguridad con dos informes, mientras que el edil de Personal ordena la clausura y pide estudios "exhaustivos"

Las presuntas deficiencias estructurales del edificio municipal de Diego de Riaño desalojado el pasado martes por supuestas vibraciones internas no han hecho sino tensar la cuerda entre las dos facciones internas del grupo municipal socialista -críticos, de un lado, y vieristas, de otro- en un momento en el que parecía reinar la calma, máxime tras el encuentro mantenido el mes pasado entre el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, y el secretario provincial del PSOE, José Antonio Viera, auspiciado por el entonces presidente de la Junta, Manuel Chaves. Poco ha durado el entente cordiale a tenor de la disparidad de criterios puesta de manifiesto ayer entre la portavoz del Ejecutivo local, Maribel Montaño, y los ediles asistentes a la junta de gobierno, y el concejal delegado de Personal, Emilio Carrillo, que deniega el regreso de los trabajadores al edificio hasta la realización de informes "exhaustivos" a manos de Urbanismo y la ejecución de actuaciones recogidas por la empresa Vorsevi frente al anuncio realizado ayer por Montaño, que instó a los 200 trabajadores desalojados a volver hoy a sus puestos de trabajo en base a otros dos informes internos realizados por Bomberos y Conservación de Edificios que avalarían la seguridad y estabilidad del inmueble.

La portavoz del gobierno reseñó ayer que la junta de gobierno había tomado conocimiento de dos informes realizados en menos de 24 horas por el jefe de guardia de Bomberos y el jefe de sección de proyectos de Edificios Municipales que "taxativamente afirman la seguridad y estabilidad del edificio" al tiempo que atribuyen las vibraciones detectadas a las obras que se acometen en un solar próximo. Montaño dijo que los temblores "son normales", que "no hay daños estructurales" y tampoco "riesgo de accidente". Por ello, la edil consideró que "es posible utilizar normalmente" el inmueble para recuperar su "normal actividad" hoy.

En este sentido, y a sabiendas de que Emilio Carrillo había rechazado ya por la mañana la posibilidad de que los trabajadores regresaran al inmueble, Montaño precisó que "el delegado de Recursos Humanos no puede hacer otra cosa que cambiar de opinión y actuar dentro de su responsabilidad". Asimismo, reiteró que Emilio Carrillo "no tiene sino que aceptar lo que dicen estos informes, realizados por técnicos de cuya profesionalidad no duda el Ayuntamiento, porque además la competencia para decidir que se vuelvan a poner en uso los servicios afectados es en última instancia de la junta de gobierno".

El desalojo del edificio de Diego de Riaño afecta a unos 200 empleados municipales que llevan desde comienzos de semana sin poder trabajar, pertenecientes a los servicios jurídicos municipales y a las sedes de las delegaciones de Salud y Consumo y Mujer.

Montaño intentó rebajar el pulso que mantuvo ante la postura de su colega de partido e indicó que el gobierno "no descarta" pedir más informes para salvaguardar la seguridad "siempre que se produzcan novedades", y dijo que se prolongaría en el tiempo la evaluación de la estabilidad de la finca.

Emilio Carrillo no asistió ayer a la reunión de junta de gobierno por estar citado a la misma hora en la presentación de una publicación editada por la Consejería de Gobernación de la que es autor junto a Juan Carlos Cuerda

De otro lado, el comité de Seguridad y Salud del Ayuntamiento, convocado ayer de forma extraordinaria y urgente, decidió dejar clausurado el edificio por determinar que los informes emitidos por Bomberos y Conservación de Edificios Municipales "no son suficientes". Además, se acordó transmitir al servicio de Patrimonio una petición para evaluar posibles sitios alternativos para la ubicación del personal, "por si se diera el caso de que éste, finalmente, no pudiera reincorporarse a Diego de Riaño".

El PP se apresuró ayer a criticarque el equipo de gobierno utilice como "munición" a los trabajadores del edificio municipal de Diego de Riaño dentro de la "guerra interna" entre "las dos familias del PSOE", representadas por el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, del lado crítico, y el edil de Recursos Humanos, Emilio Carrillo, de la corriente oficialista.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios