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Sevilla

Un violador en serie quiere pagar las indemnizaciones a sus víctimas en 185 años

  • El enfermero que fue condenado a medio siglo de cárcel pide compensar a las mujeres que asaltó a razón de 50 euros al mes

El enfermero David H. M., que fue condenado a 50 años de cárcel por violar a cuatro mujeres e intentarlo con una quinta, ha solicitado a la Audiencia de Sevilla que le permita pagar las indemnizaciones a las víctimas a razón de 50 euros mensuales, lo que implica que el pago no terminaría hasta dentro de 185 años.

El acusado remitió recientemente a la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Sevilla, encargada de ejecutar la sentencia, un escrito de su puño y letra en el que proponía abonar la indemnización a las cinco víctimas con una cuota mensual de 50 euros. La Audiencia le condenó a pagar en total 111.000 euros de indemnización a las mujeres a las que asaltó, lo que representa que, de acuerdo con la propuesta del violador, las víctimas no recibirían el pago por completo hasta dentro de 185 años, en 2194.

La Fiscalía de Sevilla y las acusaciones particulares que representaron a las víctimas en el juicio ya han mostrado su oposición a la petición del acusado, por lo que será ahora el tribunal el que deba resolver sobre la cuestión planteada.

La Audiencia de Sevilla condenó al enfermero David H. M. por unas agresiones sexuales que tuvieron lugar entre diciembre de 2002 y diciembre de 2004. En todos los casos, el individuo empleó un mismo modus operandi para perpetrar los delitos. La primera víctima fue abordada en su casa, ubicada en el barrio de Nervión, el 13 de diciembre de 2002. El acusado le roció una sustancia en los ojos, la ató con unas abrazaderas de plástico y la agredió sexualmente tras amenazarla diciéndole: "si chillas te mato".

El acusado había alegado durante la vista oral que las relaciones fueron consentidas, pero el tribunal valoró que ninguna de las víctima conocía al enfermero y recordó que esa posibilidad fue rechazada con contundencia por cada una de las jóvenes.

El acusado tenía una agenda con datos de unas 40 mujeres, de las que conocía detalles como su peso y estatura, así como los domicilios y teléfonos de cada una. La Audiencia de Sevilla condenó al enfermero a penas de entre diez y 15 años de prisión por cada una de las agresiones sexuales.

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