TIEMPO El tiempo en Sevilla pega un giro radical y vuelve a traer lluvias

Sevilla

"¡Pobre centro de ciudad!"

  • Representantes de ocho asociaciones de vecinos del casco histórico leyeron ayer un manifiesto en la Piedra Llorosa contra el plan de limitación de tráfico

"¡Pobre centro de ciudad!, ¡Pobre centro de ciudad!". Así reza el manifiesto en contra del plan de limitación del tráfico del centro que leyeron ayer los representantes de ocho de las diez asociaciones de vecinos del casco antiguo de Sevilla en la Piedra Llorosa, un antiguo sillar de la céntrica calle Alfonso XII donde José García de Vinuesa, alcalde en 1857, se sentó para romper a llorar ante el fusilamiento de 80 personas en Plaza de Armas.

Los vecinos actualizaron el lamento de este alcalde que por aquel entonces decía "¡Pobre ciudad, pobre ciudad!". De esta forma, protestaron por el plan del centro que aún no tiene una fecha definitiva de entrada en vigor. "Queremos evitar una gran matanza, que aunque no se produzca en seres humanos, sí recaerá sobre comercios y puestos de trabajo", dice el texto.

La presidenta de la asociación Estación de Córdoba, Ana Dávila, pidió "que no se apruebe el cierre hasta que no se lleven a cabo las medidas alternativas necesarias". Ésta es la idea que más repitieron ayer estos sevillanos, que admitieron no estar en contra del plan "porque somos conscientes de los problemas del tráfico en el casco antiguo". Sin embargo, lo que pidieron es que antes de que se lleve a cabo la normativa, se termine la red de Metro prevista en la zona, entren en funcionamiento los microbuses eléctricos "prometidos en su día", y se construyan aparcamientos gratuitos "alrededor de la zona prohibida". Dávila aseguró que los vecinos no se opondrán a la ordenanza municipal, una vez que sus peticiones se hagan efectivas.

La presidenta se mostró preocupada en el caso de que a algún vecino le ocurra algún problema en su casa y tenga que necesitar la ayuda de algún fontanero, carpintero o albañil. "Ninguno de ellos va a querer venir a arreglar nuestros desperfectos, ya que tendrán que estacionar en un parking que les va a costar un dineral porque en 45 minutos no se arregla una avería. ¿Qué vamos a hacer, llamar siempre a las grandes superficies?", se quejó Dávila.

Para los vecinos del centro aún quedan muchas cosas en el aire, por lo que pidieron al alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, "que se siente, recapacite, y antes de cerrar el casco antiguo cubra las alternativas que pedimos". Los presidentes de las diferentes asociaciones también se preguntaron qué sucederá cuando sus familiares tengan que acceder al centro para visitarlos. "Tendrán que gastarse dinero en un taxi o marcharse antes de que se acaben los 45 minutos", afirmó Dávila, quien irónicamente le dio las gracias al alcalde porque "nos vamos a ahorrar la merienda de nuestros familiares todas las veces que no puedan venir".

María José Rey y Manuel Antonio Ruiz Berdejo, presidentes de las asociaciones de vecinos del barrio Santa Cruz y del entorno de la Plaza del Museo, acusaron a Monteseirín, por "empezar siempre la casa por la ventana". En este sentido, Dávila también aseveró que "desgraciadamente los vecinos nos estamos acostumbrando a que este alcalde primero pone el parche y después saldrá el grano, y así no es".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios