LA Sevilla que se encontrará el candidato que resulte elegido hoy en las urnas ha mejorado con respecto a la de 2011, pero sigue teniendo carencias urgentes de asistencia social a la población que deberían convertirse en el primer objetivo del nuevo gobierno. No obstante, de producirse una situación de empate que no dejase claro esta noche quién gobernará, el primer reto de los aspirantes es conformar una mayoría estable que permita, además, el despegue que la capital espera desde hace cuatro años.

1. La creación de empleo. El paro ha empeorado en los últimos cuatro años y, con ello, la situación de de los desempleados de larga duración. Actualmente, la lista de parados ronda los 86.000, después de haberse superado en el mandato que concluye la barrera psicológica de los 90.000. El PSOE, al contrario que defiende el PP, asegura que existe la posibilidad de acometer planes de empleo municipales que están, además, vinculados a los asuntos sociales. Esto es, que las obras o servicios que se tengan que prestar en las zonas más necesitadas puedan ser prestados por personal desempleado de esos barrios. La única medida parecida a lo que plantean los socialistas anunciada por el PP es la contratación de algunos vecinos de Los Pajaritos en la reconstrucción del barrio donde, de momento, sólo se han derribado dos bloques. El PP plantea la creación de empleo desde el impulso a la empresa y la atracción de inversiones. Mientras que el PSOE, además, apuesta por facilitar la alianza de emprendedores -Espadas ha sido el candidato de los coworking esta campaña- y tejer una red de apoyo a éstos dentro y fuera de las fronteras de Sevilla.

2. Vivienda y servicios sociales. Los servicios sociales registran colas que evidencian que al aumento del presupuesto -el PP ha destinado hasta ahora siete millones de euros al año- destinado a este fin requiere también de otra organización que no sólo provenga de las ONG, refuerzos en los que se ha apoyado el actual gobierno. Los socialistas apuestan por elevar a diez millones la partida para atender casos extremos y también por un nuevo modelo donde, además, se evalúe y fiscalice a las empresas subcontratadas que prestan servicios como la ayuda a domicilio. A pesar de que no ha habido desde 2011 ni un solo desahucio, unos 17.000 demandantes de viviendas públicas esperan las llaves de los cientos de pisos que están por habitar. El PP, que en la anterior campaña prometió mil nuevas viviendas al año, no ha construido ninguna, aunque sí ha cambiado de régimen de venta a alquiler un número indeterminado y ha intentado adaptar las condiciones a cada familia. A pesar de la coyuntura de crisis del sector de la construcción, Emvisesa ha sufrido una reducción drástica de sus fondos y, además, se le encomendó la ampliación del palacio de Fibes, lastrando otros de sus cometidos. No obstante, el PP mantiene que continuará con su línea y destinará más viviendas vacías a colectivos en situación de exclusión. Y que también rehabilitará La Bachillera, continuará con Los Pajaritos y terminará con la infravivienda. Para el PSOE la prioridad será adjudicar a familias antes de que acabe el año 300 viviendas vacías.

3. La deuda y los impuestos. El gobierno entrante se encontrará con unas arcas municipales saneadas, principal logro que se atribuye el PP, y una situación económica general más próspera. A pesar del recorte en cargos de confianza y gastos superfluos acometidos por el actual alcalde, partidos como el PSOE apuestan por eliminar algo de más grasa. La deuda municipal asciende en estos momentos a 500 millones tras haberse reducido en 300, un milagro financiero que la oposición cuestiona. Y el reto ahora es revisar o bajar los impuestos y conseguir margen parapoder seguir invirtiendo. Si el PSOE llegara a la Alcaldía una de sus prioridades sería también luchar contra el corsé que la ley de la reforma local del PP ha impuesto a los ayuntamientos y que perjudica a sus competencias y a su financiación, según ellos.

4. La búsqueda de financiación. El PP ha mantenido en estos últimos cuatro años que generando confianza y seguridad jurídica se lograría atraer hasta Sevilla a muchos inversores. Y puso su confianza en la llegada de capital privado. No obstante, la inversión ha llegado con cuentagotas y uno de los retos ahora es aspirar a fondos europeos, como solución para poner en marcha algunas iniciativas. El actual alcalde asegura que ya tiene preparados los estudios y que, a partir del 25 de mayo, se podrán ya presentar al Gobierno. Si gobierna otra fuerza tendrá de plazo hasta septiembre. El PSOE, que ha criticado estos años que Sevilla no haya aspirado a captar ni un solo euro de estos fondos, también prepara sus estudios.

5. El Puerto y el río. El río de oportunidades fue el lema más manoseado por los diferentes partidos en 2011, pero muchas de ellas se han quedado en el camino. Al margen de la finalización del Muelle de Nueva York y la apertura de algunos pantalanes, en las riberas se han quedado varados proyectos como el Paseo del Arte, el nuevo uso de Altadis o el Muelle Camaronero. La atención se ha fijado en el Puerto, considerado como principal motor económico de una ciudad que aspira a reforzar su industria. El PP rescató el proyecto de zona franca que aún no se ha puesto en marcha. Y ese será otro reto para el gobierno que venga, además de su ampliación a la zona aeroportuaria, una propuesta del PP. El PSOE tiene muchas expectativas en las posibilidades de crecimiento del Puerto donde ya está proyectado un macrocomplejo comercial y de ocio, Sevilla Park, en trámite y que tendrán que sacar adelante en breve para no perder una inversión cifrada en 200 millones de euros.

6. la zona azul y aparcamientos. La ampliación de la zona azul ha centrado gran parte de las polémicas ciudadanas del mandato que expira. El PSOE ya ha prometido que la revisará y que buscará alterantivas al problema de los gorrillas en barrios como Bami, lo mismo que han impulsado fuerzas como Ciudadanos. El PP considera que la derogación del Plan Centro, los cambios en la señalización y la mejora de las líneas de autobuses han resuelto muchos problemas, pero queda por abordar la falta de aparcamiento. El alcalde cumplió con su palabra y logró devolver la fianza de los parkings que el gobierno de Monteseirín no construyó, pero luego anunció un plan alternativo que se quedó estancado. Ni el aparcamiento de San Martín de Porrres, en Triana, ni el del a Glorieta del Cid han podido resolver los obstáculos jurídicos y de financiación. El resto será retomar éste u otro plan y dotar a la corona del centro de nuevos aparcamientos que permitan al usuario conectar con otros medios de transporte. El PP apuesta por crear cuatro intercambiadores en la ciudad y por ampliar ahora el tranvía. El PSOE planea dos y la puesta en marcha de lanzaderas que reduzcan el tiempo de los desplazamientos de Pino Montano o Sevilla Este con el centro de la ciudad.

7. El Metro y la Ciudad de la Justicia. Éstos son dos grandes proyectos que parecen imposibles y, por tanto, son dos grandes retos para quien coja el bastón de mando. La falta de entendimiento entre el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía no ha propiciado la puesta en marcha de la ampliación de la red de Metro, a lo que se unen los problemas de financiación. Y tampoco ha habido voluntad política para impulsar una solución definitiva al colapso de las sedes judiciales. El PP quiso llevar la Ciudad de la Justicia al Prado de San Sebastián, a lo que la Junta de Andalucía se opuso, y la solución de Los Gordales no ha avanzado nada. Los socialistas ya han anotado en su agenda estos dos temas como prioritarios para el próximo manato. La intención es arrancar un compromiso al Gobierno andaluz para fijar prioridades y iniciar al menos una red de Metro, un proyecto cuyos resultados se verán a largo plazo y que requerirán de una inversión continua. Al Gobierno central, en otro orden, el nuevo alcalde deberá reivindicar más fondos para avanzar en vías estratégicas como la SE-40 o la red de Cercanías, dos proyectos claves para mejorar las infraestructuras y la conexión de la capital con otros puntos.

8. Espacios públicos y edificios sin uso. A veces no se trata simplemente de una cuestión de estética. El PP anunció nada más llegar hace cuatro años a la Alcaldía que cambiaría bancos y farolas de la denominada por el anterior gobierno Piel Sensible del centro. Así lo hizo. Pero hay problemas que no se han podido solventar como la falta de sombra en la Avenida de la Constitución y otros que se han añadido en un intento por abrir la mano a la reactivación de la hostelería claramente desequilibrado por la poliferación de los veladores, que también plantea el reto de ordenar un poco mejor los espacios públicos. En este apartado se podría incluir también el objetivo de reducir los efectos de la movida, una cruzada retomada por vecinos y empresarios del centro en los últimos meses. El PP parece dispuesto a reanudar la política de peatonalizaciones, por ejemplo, en el eje de la Magdalena, como ya ha hecho en Almirante Apodaca, con una polémica tala de árboles que también se ha producido en otros puntos de la ciudad. Ahora el reto de todos es cuidar el arbolado. En cuanto a los edificios sin uso queda pendiente de resolver el futuro de la Gavidia, ahora que ya no hay impedimentos de la Junta de Andalucía, Altadis o la Fábrica de Artillería, entre otros patrimonios. En marcha deberían estar ya las obras de la antigua Estación de Cádiz y la Puerta de la Carne. Ha otros enclaves, como la Fábrica de Vidrio de Miraflores, por citar un ejemplo. Este mandato se han producido polémicas cesiones que ya no podrán ser revisadas.

9. La marca Sevilla. Mejorar la imagen de Sevilla en el exterior es otro gran objetivo. El PP abanderó en su día una alianza con las grandes empresas sevillanas que exportan su talento y su marca y ésa es la línea que quiere continuar. El PSOE tiene fijada su vista en Iberoamérica, como foco de oportunidades para muchas empresas sevillanas. El reto claro es que Sevilla necesita una política exterior que vaya más allá de la venta que supone el turismo, una industria muy pujante que hay que cuidar y a la que habría que dar una vuelta más para diversificar la oferta. El PP ha encontrado en el cine y los rodajes otro filón, pero el espaldarazo sería vincular la marca a la industria y el talento y potenciar el parque tecnológico de Cartuja 93.

10. El padrón. Sevilla ha perdido población y ha caído por debajo de los 700.000 habitantes, de lo que es consecuencia que el próximo Pleno tenga 31 concejales en lugar de 33. El aumento del censo urge para evitar la pérdida de ingresos por parte del Estado. El PP anunció un plan que no ha dado resultados y el PSOE reclama incentivos para frenar el éxodo, mayor síntoma de un ciudad decadente.

Algunas propuestas en campaña

Movilidad. Ampliar el tranvía para paliar el retraso del Metro

El PP sorprendió en la campaña con el anuncio de la ampliación del tranvía hasta Santa Justa, un proyecto que había desechado y que ahora saca a a la luz, entre otros motivos, por la necesidad de trasladar las cocheras, tras perder un pleito con los vecinos. Aunque no parece que sea la prioridad de Zoido, el plan palia el retraso del Metro.

Tussam. Lanzaderas rápidaspara Pino Montano y Sevilla Este

Una de las propuestas más novedosas del programa del PSOE es la implantación de lanzaderas rápidas que unan en menos tiempo barrios tan poblacos como Pino Montano o Sevilla Este con el centro, trayectos que suponen al usuario más de una hora. Bus de tránsito rápido es el nombre, al que se unen más circulares por la Cartuja.

Mapping. Un nuevo espectáculo veraniego en las orillas del río

El nuevo invento del PP para impulsar el turismo, sobre todo en verano, es un mapping en el río Guadalquivir que podrá verse desde las dos orillas. Este atractivo, que ya fue un acierto navideño del actual alcalde, complementaría la oferta de los muelles, donde se construirá en breve un centro de visitantes y donde ya está el Castillo de San Jorge.

Chabolismo. Un plan para eliminar El Vacie en cuatro años

Una de las promesas más increíbles de la campaña es la eliminación del Vacie en cuatro años, una zona marginal que ningún gobierno, incluido el del PP, ha logrado erradicar. Zoido ya se desplazó hasta el poblado los primeros días de su primer mandato, pero la solución no ha variado demasiado. Para el PSOE este anuncio es una mentira.

Altadis. Diferentes proyectos que chocan con el acuerdo firmado

La reutilización de la antigua fábrica de tabacos de Los Remedios sigue estancada. Después de que Zoido llegase a un acuerdo con los propietarios y un proceso administrativo que generó críticas ciudadanas, ahora el resto de partidos proponen otros usos. Ciudadanos y el PSOE coinciden en apostar por un centro de innovación.

Participación. Los ciudadanos interpelarán al propio alcalde

La participación ciudadana es algo que todos los partidos prometen mejorar a base de la e-democracia, la descentralización de los distritos y otras fórmulas de partidos de izquierdas que prevén mecanismos para que el alcalde responda a los ciudadanos. La más llamativa es la de Participa Sevilla, que dará el voto en los plenos a los ciudadanos.