La mayoría de los periodistas desplazados a Bélgica quisieron saber la razón por la que Emery colocó a Iborra en situación tan adelantada, a lo que el técnico guipuzcoano respondió que es una posición que el valenciano conoce, aunque lleva tiempo sin jugar en ese puesto. "Estamos rebuscando constantemente en las características de nuestros jugadores. Iborra en sus orígenses jugó ahí y ha ido retrasando sus posiciones. En segunda línea, llegando al remate, con capacidad para llegar al gol... nos podía dar cosas. Hemos querido hacer una especie de doble juego con Iborra y con Éver Banega jugando más de cara, y con un pivote entre los dos, Krychowiak", explicó el técnico, que continuó argumentando su decisión: "Es un trabajo más del conocimiento del equipo. Es, no una prueba, sino ponerlo en práctica. Por ejemplo, el juego directo con Iborra lo ganábamos".

Emery calificó como buena la situación del Sevilla tras tres jornadas disputadas. "Es un grupo bastante parejo en el que partimos como favoritos, pero en el que no vamos a tener las cosas fáciles. El Rijeka es fuerte en su campo y el Standard también. Para nosotros sacar dos puntos aquí y en Croacia no es lo mejor, pero tampoco es lo peor", avisó.

El de Fuenterrabía dio su visión global del partido. "Hemos tenido el control y la sensación era que nos faltaba alto para ganar. La sensación es que ellos también podían haber marcado, por eso es una satisfacción a medias", recordó al tiempo que explicó la necesidad de repartir minutos: "Nos tenemos que mover desde la frialdad, la experiencia y la estadística. Gameiro se fue cuando mejor estaba, pero 60 minutos hoy era mucho para él después de tanto tiempo parado. Son jugadores que necesitamos que vayan entrando porque cuando nos hagan falta, si no tienen este proceso, no podemos tirar de ellos porque no tienen rendimiento. Pero tenemos que tener presente que todas esas rotaciones se deben hacer pensando en los objetivos y en las tres competiciones", argumentó.