Deportes

La verdad de por qué Borja Valero no es ya futbolista del Sevilla

  • El club de Nervión se planteó negociar con el Mallorca y no con el West Bromwich 'utilizando' su opción de compra, pero la situación pre-concursal de los baleares invitó a la prudencia

José María del Nido y Monchi han descartado ya por dos veces en público la llegada de Borja Valero al Sevilla por la abusiva tasación que ha hecho el West Bromwich Albion del jugador madrileño, pero, en cambio, en los pasillos del Sánchez-Pizjuán se habla sotto voce de que al final su fichaje caerá como fruta madura. El caso es que el centrocampista que brilló a gran altura la pasada campaña en el Mallorca en calidad de cedido podría ser ya desde hace bastante tiempo futbolista del Sevilla.

Cuando los técnicos decidieron que en el apartado futbolístico Borja Valero era por ritmo y visión de juego un objetivo real y acorde con lo que el Sevilla necesita para su adormecido centro del campo -extremo destapado en su día por Diario de Sevilla-, en la fase de recopilación de información de su estado contractual lo primero que saltó a la vista fue la opción de compra que el Mallorca tenía a su favor de 4 millones para hacerse efectiva antes del 30 de abril. El camino más corto, pues, para hacerse con su ficha federativa una vez cerrado el acuerdo con el jugador era utilizar al Mallorca como club puente. Pactar con la entidad balear y que ésta hiciese efectivo su derecho suscrito con los ingleses en el acuerdo de cesión, previo pacto compensatorio, unas conversaciones en las que se podrían incluso contemplar las cantidades que desde Nervión se le han reclamado luego al Mallorca a través de la LFP por los coletazos de la cesión de Martí.

Pero cuando el Sevilla fue quitándole capas a la cebolla fue descubriendo recovecos -jurídicos sobre todo- que animaron a ser prudentes con esta actuación, una fórmula agresiva que otras veces le ha dado cosas al club pero a la que no siempre es bueno recurrir. El Sevilla estudió acceder a la ficha federativa de Borja Valero a través de la opción de compra que tenía en su poder el Mallorca, pero entonces receló de su situación pre-concursal, que luego se confirmó con un acuerdo judicial el pasado 16 de mayo.

Los juristas del Sevilla avisaron a Del Nido de que los administradores concursales, al tomar posesión de los cargos, podrían deshacer las operaciones financieras realizadas por el Mallorca hasta en los dos años anteriores a la declaración de adscribirse a la Ley Concursal. Podrían hacerlo si entendían que son acciones que perjudicaban a la salud financiera de la sociedad.

Además, el Sevilla se exponía acogiéndose a esta fórmula a una reclamación ante la UEFA por parte del West Bromwich Albion al entender que ambos clubes habían burlado sus intereses aprovechando un acuerdo bilateral incurriendo en un "fraude de ley". Una situación parecida ya le costó en su día al Sevilla unos 200 millones de las antiguas pesetas (1,2 millones de euros) con el caso de Unzué-Nando.

Pero, por si esto fuera poco, el Sevilla se exponía a dejar esos 4 millones de euros como mínimo (incluso más si se hubiera pactado con el Mallorca alguna compensación por hacer de puente) en manos de una sociedad en situación pre-concursal, hoy ya un hecho confirmado. Es verdad que el Sevilla no iba a caer en el error de dejarlos así como así en el aire y hubiera obligado al Mallorca a firmar un documento de garantía. Pero ni aun así podían estar tranquilos los dirigentes sevillistas, ya que esos 4 millones consignados para la compra de Borja Valero al West Bromwich Albion podían en cualquier momento cambiar de destino según la opinión de los administradores judiciales una vez confirmada la declaración de concurso público de acreedores y estudiadas de forma pormenorizada las cuentas del Mallorca. En ese caso el Sevilla se quedaba sin 4 millones de euros, sin Borja Valero y sin poder reclamar en ningún lado.

Y si le faltaba un perejil al asunto también se podía encontrar el Sevilla con Lorenzo Serra Ferrer controlando el club después de que esta misma semana haya presentado junto a Mateo Alemany el acuerdo de venta de acciones. La primera medida ha sido fichar a Laudrup para el banquillo.

Ahora la situación está estancada en esa amplia diferencia entre lo que el Sevilla ha ofrecido al club inglés, no menos de esos 4 millones, y lo que éste está pidiendo, en torno a 7 u 8. Pero el tiempo juega a favor de los intereses blancos, que tiene un acuerdo cerrado con el jugador y el deseo firme de éste de seguir en España y jugar la Champions con el Sevilla. La operación se podría cerrar en una cifra que se mueva entre los 5 y los 6 millones aunque para ello debería ayudar la salida de algún activo de la actual plantilla de Antonio Álvarez, con todas las miradas puestas en Romaric.

En Palma también recuerdan que los ingleses, fuertes en las negociaciones iniciales, bajan notablemente sus pretensiones muy al final. De hecho, la cesión de Borja Valero se cerró el último día del plazo para fichar y a pocos minutos del cierre definitivo -incluso no jugó la primera jornada- por una cantidad de 900.000 euros, hacerse cargo de una parte de la ficha y la consabida opción de compra de 4 millones.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios