-Usted puede decirse que ha caído de pie en el Sevilla. Le catalogan como el mejor fichaje del año.

-Estoy muy contento, no me puedo quejar. Es lo que deseaba. Hay un buen grupo, estoy jugando y esperemos que todo siga igual.

-Está siendo un fijo y, además, con responsabilidad en el campo.

-Es lo que uno quiere. Uno desea jugar siempre y tener responsabilidad dentro del equipo. Me gustar tener confianza y aportar confianza a los compañeros.

-Ha pasado por grandes equipos, el Barça, la Juventus... y todo le ha ido rápido. ¿Cómo comenzó todo?

-Primero empezó como un juego. Como todo niño allá en Uruguay empecé de chiquito, a los cinco años. Luego fueron pasando los años y cuando te haces un poco más grande te das cuenta de que hay que tomarlo en serio. Llega la hora de decir que hay que apretar y la verdad es que en lo personal las cosas me fueron bien. Salí en el primer equipo de Defensor y tuve la suerte de que me fue bien en un Sudamericano, en Paraguay. Eso me sirvió para llegar a Europa y ya todo fue más rápido aún. Jugué en el Barça, el año pasado tuve la suerte de jugar en ese gran equipo que es la Juve… todo fue muy bueno y estar aquí ahora también.

-En futbolistas sudamericanos es habitual que hayan tenido familiares con antecedentes que le animaron. ¿En su caso?

-Yo no. Para mis padres también empezó como un hobby, me acompañaban y bueno… llegó. Ahora tengo la suerte de vivir del fútbol.

-Conocerá o le habrán contado que en el Sevilla hay una larga tradición de futbolistas uruguayos.

-Sí, es casi una ley que siempre haya un uruguayo en el Sevilla. Eso habla bien de nosotros. Por ejemplo, de Defensor llegó Podestá. Lo recuerdo aunque yo era muy pequeño. A uno le pone contento que hayan dejado buena imagen aquí.

-Pero todos no pueden decir eso.

-Es verdad que todos no pudieron demostrar su valía, pero bueno, seguro que algo bueno dejaron.

-¿Qué sintió la semana pasada en el Camp Nou?

-Pertenezco al Barça, todavía tengo contrato con ese club, pero bueno defendía otra camiseta con otros compañeros. Más allá del resultado, lo que se vive allí es un ambiente especial. Luego fue un partido que lamentablemente se perdió.

-Lo vivió desde la otra barrera. Más bien lo sufrió. Tremendo, ¿no?

-Es una perspectiva totalmente diferente. La calidad de los jugadores del Barça es terrible y lo han demostrado. No pudimos hacer más.

-¿Sintió impotencia? ¿Desesperación? Se le veía corriendo de un lado para otro tratando de tapar espacios que parecían enormes.

-Sí, era difícil. Ese campo, con esa afición y, aparte, con el once que presentó el Barça… pero se hizo muy cuesta arriba con el 2-0 y luego con uno menos era tratar de evitar que nos hicieran más goles.

-Desde fuera la afición salió enfadada por la imagen, porque sabiendo que se podía perder, esperaba que al menos compitiera.

-A nosotros también nos enfadó mucho. Queríamos hacer nuestro juego de la mejor manera, pero pasó lo que pasó. El resultado fue abultado porque fue un 5-0 y a nadie le gusta perder por esa cantidad, pero ya pasó. Nos quitamos la espina en la UEFA (Liga Europa).

-En Barcelona quizá lo que le privó de triunfar fue la explosión de Piqué. Y claro, Puyol... intocable.

-Está claro que son dos grandes futbolistas, que juegan todos los partidos. Allí no tuve la oportunidad de tener todos los minutos que tengo aquí para demostrar cómo uno es y son cosas del fútbol. A veces te toca jugar mucho y a veces menos. Hay que seguir intentándolo y por eso decidí salir de allí.

-¿Se plantea esta temporada para hacer méritos y quedarse aquí o para volver al Barcelona con fuerza?

-Uno está aquí para demostrar por qué fichó por el Barça. Yo lo que quiero es hacer un buen año y si el club toma la decisión de que me quede aquí estaría muy contento. Pero bueno, ahora no puedo decir nada porque de aquí a que termine el año falta mucho y pueden pasar muchas cosas en lo personal. No debo hablar mucho de ese tema.

-El precio de la opción de compra no es prohitivo para el Sevilla.

-Bueno, tenía una situación parecida en la Juventus. Ellos decidieron no pagarla y ahora se ha bajado un poco (de 11 millones de euros a menos de 5) y si el míster y el presi están a gusto conmigo y quieren que me queden, pues encantado.

-¿Ha notado el cambio del campeonato italiano al español? ¿De la Juventus al Sevilla?

-Es totalmente diferente el fútbol. En Italia es mucho más físico, más táctico. El fútbol español es mucho más lindo, hay más espacios. Y el ejemplo estuvo en el Mundial.

-¿Está en decadencia el Calcio?

-Yo creo que sí. Se ha notado. El fútbol en España, aparte de diferente al italiano, es mucho mejor.

-Lo dice un defensa y el que se practica allí les beneficia y perjudica a los delanteros en teoría.

-En Italia para un defensa es mucho más fácil. Salir, darle para arriba, poner cuerpo y pelearla. Aquí el delantero tiene mucho más espacios, pero también ello nos motiva a los defensas. Me gusta.

-Desde su llegada ha tomado además al rol de sacar el balón jugado.

-Eso creo que lo he aprendido el año que estuve en el Barcelona. Eso se trabaja bastante allí y además soy de los defensas a los que me gusta salir con el balón jugado y no pegarle para arriba, chocar y pelear nada más. Si le sirve al equipo para salir desde atrás de una forma y de tener más el balón, pues estoy contento. Así llegamos a los portería rival mucho mejor.

-¿Qué le ha sorprendido de lo que ha encontrado aquí?

-Es una buena plantilla que tiene calidad para estar en los puestos de arriba, va a estar ahí. El Sevilla se ha caracterizado por estar en los primeros lugares, pelear y ganar títulos. Tenemos que apretar para meternos en Champions y mantener el nivel que el equipo ha tenido.

-Central, pero...

-En la selección he jugado de lateral. De central es donde me gusta más porque es la posición en la que siempre he jugado siempre y donde me siento más cómodo.

-El Valencia es la Liga del Sevilla...

-Es un rival directo y un partido clave para nosotros por la posición que están ellos y la nuestra. Tenemos que hacer lo inhumano para que los tres puntos se queden aquí y que la afición se quede tranquila.

-¿Mandaría a Madrid y Barça a la liga francesa como su presidente?

-(Risas) Estoy de acuerdo con él, pero es un tema del que no puedo hablar. Mejor no tocarlo. Es verdad que todo es muy aburrido porque está todo en manos de Madrid y Barcelona y depende de cuando jueguen entre ellos dos, pero ya habrá gente que opine de ese tema.