Sociedad

"Con la Ley de Ciencia, los investigadores lograrán la estabilidad cinco años antes"

  • La ministra defiende el anteproyecto de ley ante más de 500 agentes europeos reunidos en Granada y asegura que redoblará el esfuerzo para consensuarla ahora con todos los partidos políticos

Garmendia llega a Granada reforzada por el respaldo que el Gobierno ha dado a su anteproyecto de la Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación en la que trabaja desde hace dos años y que va a suponer, por primera vez en España, un reconocimiento y estabilidad de la carrera científica. Y viene a defender un nuevo modelo de gestión de los proyectos de desarrollo e investigación con un razonamiento aplastante: "Si los fondos europeos constituyen únicamente el 5% de los fondos totales y el 85% está en manos de los países miembros, los estados no pueden realizar políticas sin contar con las regiones".

-Esta coordinación con las regiones, ¿implica establecer un nuevo modelo de gestión?

-Tanto Europa como España tienen que pasar de la reflexión a la acción. Por eso defendemos una integración de las políticas de Ciencia e Innovación en las políticas sociales que ayude a solucionar la crisis económica. Ahora mismo, Europa y España necesitan una ciencia más implicada en los grandes retos que aborda la UE. Y lo prioritario es la recuperación y el crecimiento económico. La ciencia tiene que estar implicada en los retos que demanda la sociedad, que es quien la financia.

-¿Qué es lo que deben saber los investigadores de la nueva carrera científica?

-Que por fin la ley defiende una carrera científica predecible, basada en los méritos y reconocida socialmente. Donde todas sus fórmulas contractuales serán mediante contratos. La nueva ley acaba con las becas y, por lo tanto, se afianza el reconocimiento laboral de los investigadores en todos sus tramos, incluido el predoctoral. Ésta es una vieja reivindicación de los jóvenes investigadores que la ley atiende por primera vez. Además, este contrato predoctoral para los jóvenes investigadores es una fórmula que ahora mismo han adoptado algunos países del norte de Europa, además de Francia. La edad media de estabilización en nuestro sistema se reducirá en cinco años, es decir, si ahora estamos en una media de 39 años, en función de cómo hemos diseñado los diferentes tramos contractuales para los investigadores, esta edad media bajará a los 34 años.

-Y se permite la movilidad de los investigadores, ¿no?

-Por primera vez, los investigadores van a poder moverse libremente dentro del sistema público de investigación, ya sea en los centros de investigación, en las universidades o en los hospitales. Y se permite la movilización entre el sector público y el privado.

-¿Esto será gracias a una homogeneización de las categorías?

-Ahora mismo, dentro de los siete organismos públicos de investigación no se puede dar la movilidad porque los contratos son diferentes, así que hemos creado las mismas escalas para todos.

-Los más críticos apuntan que en el borrador no se detalla bien cómo se va a organizar Agencia Estatal de Investigación…

-Bueno, si hubiéramos detallado al máximo cada uno de los puntos del borrador, habríamos tenido que demorar mucho la puesta en marcha de esta ley. Tenemos el compromiso de desarrollarla en el plazo de un año (como máximo). Pero ya estamos trabajando los estatutos de la Agencia Estatal de Investigación y, una vez esté aprobada la ley, pondremos en marcha la Agencia.

-¿Volverán a consensuarla?

-Un instrumento tan importante como es la Agencia lo abordaremos de nuevo en el diálogo con todos los agentes económicos y sociales, sobre todo con los que ejecutan la investigación. Y a ser posible con el consenso parlamentario para que sea estable en el tiempo y competitiva. El mismo esfuerzo que hemos hecho con los agentes lo redoblaremos ahora con todos los partidos políticos.

-¿Alguna novedad?

-Hay un bloque de medidas más vanguardistas que convierten a esta ley en pionera a nivel internacional. Como es el reconocimiento de la igualdad de género, pero no sólo porque creemos que es un aspecto de justicia social, que lo es, sino porque también conlleva un aspecto económico. España no puede renunciar la 50% de nuestro talento. No se lo puede permitir.

-¿Qué reconocimiento tendrá la cooperación al desarrollo?

-Si un investigador decide poner su conocimiento al servicio de la cooperación al desarrollo, será un mérito que se verá recogido en su curriculum al igual que la transferencia del conocimiento. Además, hay otro aspecto novedoso: la publicación en abierto del conocimiento que haya sido financiado con fondos públicos. Con la nueva ley las investigaciones deben ser abiertas y accesibles para la sociedad.

-La mayor queja de la Federación de Jóvenes Investigadores/Precarios (FJI) es el recorte presupuestario en I+D, ¿cómo van a sortear esta reducción?

-No todos los países europeos atravesamos las mismas dificultades. En este momento, en el que tenemos un nivel de desempleo tan elevado, una apuesta presupuestaria por la Ciencia que garantice la plena operatividad de sus capacidades científicas, con todos los proyectos de investigación en marcha financiados y nuevos proyectos para 2010, es un magnífico compromiso. Y los investigadores de este país deben reconocerlo, no ya al Gobierno, sino a la sociedad, que les financia este esfuerzo.

-¿Cuánto le va a costar al Gobierno esta ley?

-Bueno, veremos finalmente cómo sale aprobada, pero en la memoria económica se recoge todas las iniciativas aprobadas por el Gobierno. Aunque el compromiso del Ministerio es que esta ley minimice los costes para el sistema. Por ejemplo, la nueva Agencia Estatal de Investigación tiene que salir del propio gabinete. Es decir, una parte importante del Ministerio se convertirá en Agencia Estatal de Investigación.

-Se habla de los sin papeles, pero ¿cuántos investigadores hay realmente en España?

-Aquí sin papeles no hay. Y ahora no sólo no habrá sin papeles sino que todos estarán con contratos. Hay que compararse con el resto: Europa tiene una media de 6 investigadores por cada mil empleados, de hecho uno de los problemas de competitividad de Europa que ahora estamos debatiendo es que en los últimos diez años esta cifra no se ha movido. Pero España ha hecho un esfuerzo muy importante, porque ha incrementado un 30% los recursos dedicados a la investigación y ahora mismo estamos en 6,47 investigadores por cada mil empleados. Así que España está por encima de la media europea. Aunque la previsión es que nuestras empresas de I+D+i se equiparen no sólo a la media europea, sino a los grandes (Francia, Alemania y el Reino Unido).

-Todos los investigadores que estén acogidos ahora al sistema tradicional, con becas y contratos, ¿deben cambiarse al nuevo modelo o agotar el sistema?

-En principio está previsto que lo que está ahora mismo en vigor se agote hasta el final del ciclo. Pero el investigador siempre tiene la posibilidad de renunciar a lo que tiene y volver a presentarse a las nuevas convocatorias.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios