Enrique Ponce ha experimentado una notable mejoría de la grave cornada y la fractura de la clavícula izquierda que sufrió el pasado 18 de marzo en la plaza de toros de Valencia, tras un intenso plan de rehabilitación. Ponce, que hasta ahora sentía fuertes dolores en la zona de la cornada -el pitón penetró por la axila y le llegó hasta el cuello- ha recobrado mucha movilidad en ese brazo derecho. En breve comenzará a torear de salón, con la intención de estar preparado para torear en Sevilla.

El diestro valenciano afirma: "Hasta ahora tenía un gran dolor en el pecho que me impedía hacer cualquier movimiento, pero con los estiramientos que estoy haciendo noto que mejoro día a día y el dolor ahora es soportable". En cuanto a la fractura, explica que "todavía no está consolidada pero ya se está haciendo el callo óseo".