manuel escribano. matador de toros

"Mi meta es salir de las corridas duras y competir con las figuras"

  • Ha regresado tras una gran campaña en América, debutando en cosos de México, Perú y Ecuador Comienza 2016 en Valencia, Arles y Sevilla

El diestro Manuel Escribano (Gerena, 1984) acaba de finalizar su campaña americana en cinco países y en la que ha debutado en cosos de México, Perú y Colombia. El torero, que lidiará en Sevilla toros de Victorino Martín y Miura, continuará en 2016 apoderado por la empresa de Madrid, Taurodelta, en busca de alcanzar los puestos cimeros.

-Manuel, ¿cómo evalúa su periplo por tierras americanas?

-Muy positivo. He sumado diez corridas, con triunfos importantes y he perdido en algunas ocasiones la Puerta Grande por la espada. Sobre todo, estoy muy contento con la actuación de la confirmación en La México, donde toreé muy despacio a mi primer toro y corté una oreja al segundo, muy exigente. En Medellín, con uno peligroso que me cogió y lanzó al callejón cuando banderilleaba, realicé una faena muy emocionante. Y luego, entre otras buenas que destacaría se encuentran las que hice en La Petatera y en León. En México he descubierto un toro que me va genial para el toreo largo y despacio que me gusta.

-La cogida en Medellín fue brutal, parecida a la terrible en Sotillo de la Adrada...

-Sí. Me asusté mucho. El pitón me pasó rozando el costado y no me caló de milagro. Además, tuve la suerte de que el toro me tiró al callejón. Si me atrapa contra las tablas... Pero seguiré banderilleando de ese modo.

-¿Cómo ha planteado la temporada 2016?

-Comienzo en Fallas, con la de Adolfo Martín. Luego, Arles y Sevilla. En 2016 quiero torear lo mismo que el año pasado -47 corridas- o más que en 2015. En el apoderamiento, continuaré con Taurodelta porque nos ha ido bien a ambas partes.

-En Sevilla se enfrenta a 'victorinos' y 'miuras', como el año pasado.

-En Sevilla, sinceramente, tras la gesta del año pasado, esperaba más; al menos una corrida que no fuera de las duras. Me hubiera gustado matar la de Victorino o bien la de Miura y otra de un hierro distinto porque no quiero estancarme en este tipo de toro y menos en las grandes ferias. Quiero competir con los grandes y esperaba en Sevilla algo más.

-Valore los carteles.

-El victorino es un toro que se mueve y es exigente. Llevo ya siete u ocho corridas. Toreo junto a Ureña, que es un torero poderoso, y Morenito, de pulso y temple. De Miura he toreado siete corridas. Es un animal imprevisible. Alterno con Rafaelillo, que lo tiene todo demostrado, y Castaño, otro especialista en este tipo de corridas.

-¿Qué supuso profesionalmente la temporada anterior?

-Fue decisiva para seguir funcionando. He logrado faenas de entrega y valor, con pureza, que han reconocido la afición y los empresarios.

-¿La tarde más importante fue ante 'adolfos' en Madrid?

-Sí. La faena a aquel toro de Adolfo Martín, al que corté una oreja, fue la que más me dio. En Sevilla, destaco la faena al victorino al que corté una oreja.

-¿En qué actuación expuso más?

-De las más complicadas fue el mano a mano con Rafaelillo en Valencia. No me embestía ningún toro. Salió uno en el que tuve que dejarme matar y fui capaz de empatar la tarde a Rafa. También fue muy duro un toro de Miura en Lima.

-Más allá de trofeos, ¿en qué ha evolucionado más su toreo?

-En la muleta. Sobre todo en pureza y calidad, con muletazos largos.

-¿Y en qué debe mejorar?

-En torear mejor, en perfeccionar la estética, en toques.

-En estos momentos, de una escala de cero a diez, ¿en qué momento de su carrera se encuentra?

-En un siete. No me conformo. Quiero seguir creciendo y tengo que hacerlo para llegar a los puestos de privilegio, que sería el diez. Tengo mucho por hacer y demostrar.

-Su meta.

-Conseguir dos portazos grandes en Sevilla y Madrid para salir de las corridas duras y competir con las grandes figuras del toreo.

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