La compañía de producciones infantiles Miguel Pino desembarca en el Teatro Alameda para proponer, en el marco de la Bienal, un espectáculo de flamenco apto sólo para los más pequeños de la casa. En La guitarra voladora se mezclan títeres y actores de carne y hueso para proponer un viaje a través del flamenco a partir de la mirada de un niño. La obra puede verse el sábado y el domingo a las 19:00.

En un cuarto de ensayo, unos amigos se reúnen para cantar, bailar y tocar la guitarra cuando reciben la inesperada visita de un pequeño duende con su guitarra voladora y una bruja que intentará que todo salga mal. Con estos ingredientes, La guitarra voladora construye sobre el escenario un universo mágico con el que acercar a los mas pequeños la expresión artística que resulta de la unión del cante, el baile y el toque. Junto a los títeres, el reparto del espectáculo -está dirigido y escrito por Miguel Pino y Antonio Pino- está compuesto por María Almendro (cante), Manolo Albarracín y Rocío Portillo (baile) y Antonio Delgado (guitarra).

Durante los 50 minutos que dura el espectáculo y a través de una serie de directrices pedagógicas, letras, cantes, palmas y bailes llegan a los niños a través de una manera amena y divertida con la ayuda de personajes como un duende, una bruja, una maceta o un botijo que cobran vida propia.

La compañía de Miguel Pino -su historia se remonta a 1959- es una de las pioneras del teatro de títeres y ha actuado en los principales escenarios de España, Europa y América, realizando en televisión y radio programas propios con un gran éxito. Miguel Pino es también el creador del personaje Peneque, que con el paso de los años se ha convertido en un clásico.