Huelva

Del Valle quiere rectificar su declaración a los dos años del asesinato de Mari Luz

  • La Policía Nacional acordona el Palacio de Justicia ante la segunda comparecencia judicial de los presuntos autores del crimen · El pederasta solicita prestar nuevo testimonio y que testifique Isabel García

No había ninguna multitud esperando su llegada, apenas algunos testigos. A sólo dos días de cumplirse el segundo triste aniversario de la desaparición y muerte de la pequeña Mari Luz Cortes, el presunto autor, Santiago del Valle, arribaba al Palacio de Justicia de Huelva casi en el anonimato para realizar su segunda comparecencia judicial.

Eran las 13:00 y la presencia del pederasta (que llegó al centro penitenciario onubense una hora antes procedente de la cárcel granadina de Albolote) casi hubiera pasado desapercibida salvo por la existencia de un dispositivo de seguridad establecido por la Policía Nacional, que se incrementó ya por la tarde para blindar la sede judicial a la salida de los imputados. Su hermana Rosa, conducida directamente de la prisión de Sevilla, llegaba poco después (13:40). Miraba directamente a las cámaras.

Ninguno de los imputados, citados para ser informados por la autoridad judicial de que serán juzgados por un tribunal popular, llegó a declarar. El pederasta quiere seguir la línea que ha mantenido en el último año, periodo en el que ha remitido diversas cartas tanto a su abogado como a la instructora, en las que afirma que "ni si quiera vio a Mari Luz" el 13 de enero de 2008, cuando la pequeña desapareció a pocos metros de su casa en El Torrejón.

Santiago del Valle se desdice de las tres declaraciones que ha realizado hasta el momento (en Granada, tras su detención en Cuenca, y en Huelva en marzo de 2008) y ayer, el letrado que ejerce su defensa, Juan López Rueda, solicitaba (a petición de su cliente) a la titular del Juzgado de Instrucción 1, María José Fernández Maqueda, prestar nuevo testimonio para rectificar y hacer borrón y cuenta nueva en su declaración.

La posible declaración del pederasta es sólo una de las cuestiones sobre las que tendrá que pronunciarse la instructora en las próximas dos semanas. Tras la modificación del procedimiento a Ley del Jurado, ordenada por la Audiencia Provincial, acusaciones y defensas ponen sobre la mesa la petición de nuevas pruebas antes de cerrar la causa. López Rueda solicitaba también la comparecencia de la mujer de Del Valle, Isabel García, ya que todos los testimonios suyos que hay en el expediente lo son en calidad de imputada y, tras quedar fuera del proceso, la defensa pide que se le llame a declarar como testigo, petición a la que se suma la comparecencia además de un policía nacional y de otro testigo que está en el sumario.

La situación procesal de los hermanos Del Valle se mantiene. De momento. Ambos están imputados por asesinato y por un segundo delito contra la libertad sexual: el pederasta como presunto autor y su hermana como cooperadora necesaria. La Fiscalía y la acusación particular solicitan la prórroga de la prisión preventiva (en marzo se cumplen dos años) mientras que las defensas reclaman su puesta en libertad, aspecto sobre el que tendrá que pronunciarse también la instructora.

La calma marcó la estancia de los imputados en la Audiencia Provincial, con la excepción de curiosos, algún grupúsculo de jóvenes que la Policía mantuvo a raya y un único altercado que protagonizaron los abuelos paternos de la pequeña Mari Luz.

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