El candidato a la Alcaldía del PP, Juan Ignacio Zoido, ha manifestado este lunes en rueda de prensa que la Junta de Andalucía tiene una deuda con el Ayuntamiento de Sevilla de más de 7 millones de euros en concepto de impuesto.

En el año 2007 el Partido Popular puso de manifiesto cómo el gobierno autonómico debía algo más de 5 millones de euros al Consistorio hispalense, deuda que subsanó en su momento. Sin embargo, tres años más tarde la Agencia Tributaria Municipal (tal y como se puede ver en el documento adjunto) informa cómo la deuda actual de la Junta de Andalucía con el Ayuntamiento de la capital asciende a 7,4 millones de euros,  lo que supone el 80% del importe del consumo de toda la energía eléctrica del Ayuntamiento de Sevilla durante un año.

El principal problema, según Zoido, es que el Ayuntamiento da un  tratamiento especial a la Junta que al resto de los contribuyentes. La mayor parte de la deuda procede del IBI (Impuestos de Bienes Inmuebles). Del total, más de 5 millones se refiere a la Junta de Andalucía, 1.112.971 euros al Servicio Andaluz de Salud y 1.189.724 euros de EPSA.

Hace varios años el Gobierno municipal reconoció que no siguió el procedimiento habitual que sigue con cualquier ciudadano, (cuando un ciudadano no paga el IBI le embargan los bienes), sino que crearon unos grupos extraordinarios de trabajos para llegar a la conciliación de dichas deudas.

Ahora, una vez que se verifiquen los últimos pagos pendientes del segundo semestre del 2010, la Agencia Tributaria se dispondrá a efectuar una nueva conciliación de los pagos a partir de la creación de nuevos grupos de trabajo. Zoido, por su parte, se pregunta para qué crear dichos grupos si la Agencia ha confirmado dicha deuda.

Zoido no sólo denuncia la deuda económica sino también la deuda social que la Junta tiene con los sevillanos, de tal manera, que son muchos los centros de salud que están pendientes de construcción, discapacitados sin atenciones o centros de mayores que nunca terminan de llegar.

Asimismo, el PP denuncia que, a pesar de que la subida del IPC es del 1,6%, el Ayuntamiento, sin embargo, aumenta los impuestos hasta el 5%, lo que supone una subida de más de un 300%.