Antonio Manfredi Díaz

Periodista

El año 2010 fue el año del Ipad, el dispositivo que rompió definitivamente con los cables y, por lo tanto, el inicio de una carrera por ponerse a su altura que desembocó en el despunte del sistema operativo Android, creado y regalado por Google a los fabricantes para competir con el gigante Apple. En muy pocos meses se pusieron en el mercado nuevos aparatos, como los teléfonos HTC, comparables al Iphone (salvando las cuestiones estéticas) y, sobre todo, el Samsung Tab, una tableta más pequeña que el Ipad, pero llena de posibilidades, que atrajo a usuarios de todo el mundo, deseosos de compartir un sistema operativo como Android, en manos de miles de desarrolladores que, libremente, llenan la Red de aplicaciones. Estamos hablando de 2.500 millones de descargas en el Market de Android; 100 descargas por segundo para la plataforma libre de Google.

Al contrario de Apple, cada vez más restrictivo en compartir su éxito y sus posibilidades. Y esto es sólo el comienzo. Blackberry, que ya no es ni mucho menos la referencia única empresarial y también se ha lanzado al mercado joven y doméstico, sacará su propia tableta. Será el comienzo de una guerra comercial sin cuartel que supondrá, antes del verano, una alternativa más de Apple a su Ipad, más pequeña. Y, al final del año, el Iphone 5, del que se resisten a dar datos, acostumbrados como están a las sorpresas para sus usuarios, como fue admitir la videoconferencia vía Skype desde el primer día del año 2011.

Además, se espera que otro gigante, Sony, nos sorprenda con su PlayStation Phone, un dispositivo para juegos, pensado para una generación que no sabe vivir ya sin teléfono móvil. Las tabletas impondrán su ley y, por lo tanto, los miniportátiles perderán mercado a su favor y los fabricantes (todos radicados en China) aguzarán el ingenio para atraer más público. Los que sí se seguirán vendiendo con razonable éxito serán los lectores de libros electrónicos, sencillamente porque hay un público maduro para ello, que no quiere pantallas iluminadas, que dañan, a la larga, la vista. Eso sí, sobre todo en España, las editoriales tendrán que empezar a pensar en lanzar sus novedades también en formato electrónico, a un precio inferior (no hay costes de impresión ni de distribución), si no quieren que la piratería les quite el puesto, porque proliferan como setas las páginas web que ofrecen libros electrónicos. 2011 será también el año del despegue del vídeo como contenido primordial en Internet, ya que formatos y fabricantes se adaptarán a todas las posibilidades, abriendo un camino franco del que se aprovecharán los productores audiovisuales.

En la práctica, uno de cada dos contenidos que viajan por la Red tienen que ver ya con el vídeo, de modo que el universo audiovisual se abre en calidad, territorio y capacidad…para acabar ofertándonos también contenidos en 3D, aún muy escasos, pero con muchas posibilidades, gracias a que ya no serán necesarias las tan molestas gafas. De modo que vamos hacia una estructura familiar fragmentada, disfrutando su ocio cada cual en su propio dispositivo, viendo lo que le apetece y cuando le apetece. Y otro concepto arrollador y determinante de la nueva era digital es el de cloud (nube). El llamado cloud computing, (almacenar y acceder a datos y aplicaciones en Internet, sin tener que hacer gasto alguno en infraestructuras informáticas) supone que casi la mitad de las empresas españolas está ya apostando por hospedar sus datos en entornos cloud privados. De hecho, el primer Centro Demostrador de cloud computing se crea en Sevilla de la mano de la Junta de Andalucía y red.es, con fondos FEDER. Microsoft y Vodafone se han comprometido a aportar 1,8 millones de euros en los próximos tres años para el desarrollo del proyecto, que estará gestionado por la Asociación de Empresarios de Tecnologías de la Información y Comunicaciones de Andalucía (ETICOM). Una apuesta que debe concretarse en los primeros meses de 2011 y que abrirá las puertas a miles de pymes de toda España. Será también el año de la consolidación de Tuenti, la red social española que compite abiertamente con Facebook y pertenece a Telefónica, gestionando tarjetas de prepago que se ofrecerán a bajo precio a sus usuarios, principalmente adolescentes. Finalmente, una pregunta que tendrá respuesta este año que ahora comienza.

Los teléfonos móviles podrán usarse ya como monederos y, por lo tanto, podremos hacer compras fácilmente, con seguridad, agilidad y comodidad. Será gracias a la tecnología NFC (Near Field Communication) que brinda a los dispositivos una comunicación rápida y segura de corto alcance. Se dice que el Iphone 5 la incorporará, con lo que todos los fabricantes irán detrás, aunque, en este caso – y parece que sólo en este caso – es Nokia quien se está adelantando para sus nuevos dispositivos. En resumen, Movilidad, Redes Sociales, Cloud y Vídeo. Aunque los usuarios más pragmáticos siguen pensando que a ver si es éste el año en que los fabricantes mejoran las baterías de sus dispositivos y se pone en marcha el obligatorio sistema estándar de cargador para los móviles, de modo que dejemos de cargar con varios de ellos allá donde vamos.