El Real Betis dejó escapar la oportunidad de recortar puntos con sus rivales en la lucha por los puestos europeos y de distanciarse de un enemigo directo como el Getafe (0-0). Fue en un partido de ida y vuelta en el que la apuesta de Pepe Mel por cuatro delanteros al efecto entregó el mando del juego al equipo de Luis García Plaza, que redujo el peligro verdiblanco a las jugadas a balón parado y a acciones aisladas protagonizadas por Joel Campbell con su entrada en la segunda mitad.

Durante el primer acto, se pudo comprobar la similitud de dos equipos que apuestan por un fútbol en el que prácticamente se desprecia el control del juego en favor de las transiciones rápidas para conectar con las bandas y los de arriba. Ante este panorama, el mal estado de forma de Cañas y Beñat quedó retratado. Más si cabe con la entrada en el equipo de Pabón tirado a la derecha en sustitución de Joel Campbell, la novedad que acentuaba el habitual dibujo del equipo verdiblanco de cuatro defensas, cuatro delanteros y una isla de dos centrocampistas perdidos en terreno de nadie. La consecuencia fue que el Betis llegó al área contraria en apenas tres ocasiones y dos fueron a balón parado en saques de esquina de Beñat con Paulao y Molina como amenazas. Un balance muy pobre para toda una primera parte.

La distancia entre líneas entregó de facto el juego al Getafe, y con ello las oportunidades. La más clara, un córner que Pedro León sirvió directo en el minuto 40 y que Adrián desvió con la punta de los dedos hacia el larguero cuando el balón enfilaba la red verdiblanca. El ex madridista disfrutó de otra ocasión en un rechace con el portero bético vendido, pero no pudo concretar el remate porque un defensa le golpeó en la espalda en su intento despejar a la desesperada. El árbitro no pitó penalti, llegó el descanso y, con él, el respiro y las gracias de la parroquia local por el 0-0.

El Betis salió sin sustituciones en la segunda mitad, pero mejoró con el intercambio de posiciones entre Rubén Castro y Pabón. Precisamente en una acción protagonizada por el canario el equipo bético pidió penalti. El árbitro parecía haberlo concedido, pero en realidad estaba señalando saque de puerta y ahí se quedó la cosa entre las protestas béticas. Mel sí apeló al banquillo pasado el minuto 60 con un doble cambio que daba entrada a Joel Campbell y Álvaro Vadillo por Juan Carlos y Jorge Molina. Las sustituciones dieron frescura a los béticos, que aunque seguían sin equilibrio, sí metían ahora miedo arriba. Pero no fue sin antes llevarse un susto del Getafe, que estuvo a punto de rentabilizar la enésima pelota perdida por Cañas en un robo que Colunga acabó desperdiciando.

Con Campbell en el campo, las ocasiones empezaron a llegar. La más clara, una asistencia del costarricense a Pabón en la que al colombiano le faltó serenidad para pensar y acabó apostando por la potencia para estrellar la pelota en el cuerpo de Codina. La cosa parecía que había tomado un cariz más verdiblanco, pero fue sólo una intermitencia más en el encuentro y el equipo azulino volvió a retomar el mando con Lafita ya en el césped.

Nosa reapareció en el Benito Villamarín entrando por Beñat, que se marchó lesionado por un pisotón. Un cambio que dio algo más de pausa al juego bético en los minutos finales, en los que la intensidad se fue mermando hasta un final que confirmó un empate 0-0 justo que evita que el Betis dé un golpe en la mesa en su lucha por los puestos europeos.