Carolina Marín empieza hoy a competir en el Abierto de Hong Kong, un torneo de la categoría Superseries. Y lo hará frente a la japonesa Mitansu Mitani, al igual que sucedió la semana pasada en el Abierto de China en el que la onubense alcanzó las semifinales.

Marín, medalla de oro olímpica en Río de Janeiro, doble campeona del mundo y triple campeona de Europa, espera hacer un gran papel en la antigua colonia británica. Parte como cabeza de serie número 4 de una competición en la que aspira a sumar su tercer título de la temporada. Hong Kong es la última cita puntuable para conocer quiénes serán las ocho participantes que estarán en el último gran torneo del año: el Superseries Masters Finals de Dubái que se desarrollará entre el 13 y el 17 de diciembre. La volantista de Huelva ocupa actualmente la quinta plaza del ranking mundial y la sexta de la Destination to Dubai, la clasificación específica para ese Masters.

La campeona olímpica dice que 2017 ha sido "un gran año profesional"

La reina del deporte onubense, que comenzó a jugar al bádminton en la cantera del CB IES La Orden, ha vencido a Mitani en sus seis enfrentamientos precedentes. El último la semana pasada en el Superseries de China, en el que la jugadora de Huelva no tuvo problemas para doblegar a la nipona en dos sets por 21-4 y 21-17. Si gana su rival en los octavos de final sería la taiwanesa Chia Hsin Lee o la canadiense Michelle Li.

En unas declaraciones concedidas a la agencia Efe en Hong Kong, Marín asegura que está muy satisfecha con su trayectoria durante 2017, que calificó de "gran año profesional" por haber logrado llegar a tres finales tras recuperase de una larga lesión.

"Haber podido recuperarme de una dura lesión de cuatro meses tras los Juegos Olímpicos de Río disputando tres grandes finales a lo largo de este año, me ha dado mucha confianza y no puedo más que calificar 2017 de un gran año profesional", declaró.

Marín confiesa que se siente muy motivada por el alto rendimiento que reina en el bádminton femenino actual, prácticamente dominado por jugadoras del continente asiático.

"Somos unas diez jugadoras las que ahora estamos en el mismo nivel y disputándonos las finales de los grandes torneos, algo que te ayuda a crecer mucho como profesional y a seguir disfrutando dándolo todo en cada partido", concluye.