La situación en el Alcalá es comprometida. La última derrota ante el Linares ha llevado al conjunto blanquiazul a ocupar, por vez primera en la temporada, uno de los cuatro puestos de descenso. Sin embargo, su nuevo técnico Carlos Ríos, no arroja la toalla y confía en que su nuevo equipo logrará la salvación. El ex preparador de la Balona analizaba el choque del pasado domingo en el Francisco Bono, destacando el potencial del rival: "El resultado es inamovible. Nos enfrentamos a un equipo muy bueno, pues el Linares es un conjunto de mucha calidad. Además, el primer penalti fue muy riguroso y la expulsión influyó mucho, pero son cosas que pasan en los partidos y lo que tenemos que hacer es olvidarlas lo antes posible".

La mala racha de cuatro partidos sin ganar, ha mermado la moral del plantel alcalareño. Sin embargo, Carlos Ríos apuesta por el buen hacer de sus pupilos para conseguir el objetivo: "Los jugadores están tocados anímicamente por las últimas derrotas, pero son conscientes de que quedan cinco partidos y tienen que intentar sacar el máximo número de puntos posibles. Ahora, tenemos que creer en la salvación, pues no es el momento de bajar los brazos". El nuevo inquilino del banquillo del Alcalá conoce perfectamente el club, pues fue el artífice de que los del Francisco Bono ascendieran a Segunda B. Además, es consciente del delicado momento en el que ha llegado, pero no duda en señalar que lo va a dar todo por lograr la permanencia: "Es un reto difícil, pero a la vez bonito. A mí me gusta ponerme desafíos complicados, pues no me da miedo asumir la responsabilidad que tiene el Alcalá de mantener la categoría. El fútbol es muy complicado, pero tenemos que ir partido a partido para que al final hayamos obtenido la salvación".

El calendario del Alcalá en las últimas cinco jornadas del torneo no es para ser optimista, pues los rivales son muy duros. No obstante, el preparador del cuadro panadero prefiere no hacer números y centrarse en el trabajo diario: "Nos quedan rivales de la zona media alta de la tabla, y no podemos echar cuentas, pues nos perjudicaría. Tenemos que creer en nuestras posibilidades e intentar sacar adelante el duelo en Puertollano".

Además, Carlos Ríos entiende que una victoria en la siguiente jornada elevaría la moral de unos jugadores que verían el futuro desde un prisma diferente: "Estando en la zona baja todo se ve negro, pero tenemos que tener estabilidad y confianza, pues tampoco debemos demostrar mucha euforia si logramos los tres puntos en la próxima jornada".

Por último, el técnico de Sanlúcar de Barrameda le manda un mensaje de confianza a la sufrida afición del conjunto de Alcalá de Guadaíra: "Tienen que tener claro que el equipo se va entregar en cuerpo y alma para que su equipo permanezca una temporada más en Segunda B. En fútbol, nunca se sabe lo que puede pasar, pero, por lo menos, que la conciencia de los jugadores y la mía estén tranquilas, pues sería señal de que lo hemos dado todo".