El entrenador del Betis Energía Plus, Javi Carrasco, reconoció al término del encuentro que la de ayer fue "una dura derrota", sobre todo porque el choque se decidió "en el último segundo".

"Creo que competimos y mandamos en la mayor parte del partido, pero luego ellos reaccionaron y tienen mucho talento. Creo que hay que felicitar a la plantilla por el trabajo, y también a la afición, porque estuvo de diez animando", declaró el sevillano.

Esta vez las rotaciones no surtieron el efecto esperado. "Tuvimos más frescura en líneas generales, pero las faltas nos perjudicaron, porque las faltas de Nelson nos obligan a hacer otro tipo de rotaciones", opinó Carrasco.

La situación no pinta nada bien para el Betis. Aun así, su nuevo entrenador confía en enderezar pronto el ritmo, aunque cada vez quede menos tiempo: "Confío en toda mi plantilla. Estoy a muerte, igual que todos. Tenemos que seguir así. Muchos jugadores que salieron del banquillo sumaron".

Pero por mucho que se apele a la confianza grupal, lo cierto es que el vestuario está tocado. O "mitad y mitad", según su míster. "Los jugadores están dolidos por la derrota, pero pensando que tenemos que seguir en esta línea", reveló.

Ese es el plan del preparador verdiblanco, que ya piensa en el choque frente al Zaragoza, sin duda determinante. "Iremos a por todas y trabajaremos fuerte para ello. Afrontaremos lo que venga de forma profesional y unidos", aseguró.

Y preguntado por el arbitraje, Carrasco prefirió no echar más leña al fuego: "No voy a lanzar una bomba, pero ya van varios partidos en los que las decisiones arbitrales caen del lado contrario".