Marcelino García Toral, entrenador del Racing, se quejó en la rueda de prensa de ayer, previa al trascendental choque que vivirá su equipo, de la frialdad con la que se espera en Santander la visita del Sevilla, cuando a su juicio se trata del "gran partido del año" para el conjunto cántabro por lo mucho que se juega en el envite.

El técnico asturiano dedicó gran parte de su habitual conferencia de prensa a expresar su extrañeza por la falta de tensión que aprecia en el entorno racinguista, y no le vale la excusa de que el partido se juegue entre semana. "Parece un partido más, un partiduco", opinaba Marcelino y subrayaba que, "junto con la semifinal de Copa del Rey ante el Getafe, no se ha vivido aquí otro partido tan importante".

Marcelino insiste en que se le dé al partido la importancia que tiene porque una victoria del Racing supondría aventajar al Sevilla en cuatro puntos a falta de dos jornadas, dejar prácticamente sentenciada la UEFA y "seguir luchando hasta el final por la Champions".

El técnico asturiano subraya que sería "difícil de entender" que los Campos de Sport de El Sardinero no estén esta tarde a partir de las ocho "hasta la bandera, con un público entregado a su equipo". En este sentido, opina que sus jugadores se han merecido a lo largo de la temporada que la afición "les reconozca ahora su trabajo". "Nosotros sí somos conscientes de lo que nos jugamos", precisó Marcelino, quien confesó que está "loco de contento" por tener la posibilidad de afrontar un final de Liga como éste. "Partidos como éste hasta ahora no he vivido ninguno", destacó.

Por lo que se refiere al Sevilla, el técnico del Racing considera que los andaluces "tienen un grandísimo equipo", por lo que "será muy difícil sacar el partido adelante". Para Marcelino "el Sevilla puede resolver un partido en cualquier momento", ya que dispone en su plantillas de "grandísimas individualidades, con futbolistas internacionales reconocidos a nivel mundial".