El español Rafael Nadal ha advertido de que  "será complicado" competir por ganar el Abierto de tenis de Australia después de medio año fuera del circuito por lesión. "Milagros no hay. Es improbable que llegue y pueda competir para  ganar el Open de Australia", dijo el número cuatro del mundo en una entrevista radiofónica con Onda Cero. "Será un proceso duro al volver. No pretendo que las cosas sean fáciles. Será complicado coger el ritmo. Necesitaré un tiempo", advirtió el jugador de 26 años. 

Nadal confirmó que su "objetivo" es regresar a final de año en el torneo de exhibición de Abu Dhabi, pero señaló que "hay que tener la paciencia para volver en el momento correcto. Ni Abu Dhabi ni Australia son el fin del mundo para mí", advirtió. "Este último mes he dado un paso adelante importante", dijo. "Pero llevo cinco meses sin competir y eso se nota". 

Nadal no juega desde el 28 de junio, cuando fue eliminado en la  segunda ronda de Wimbledon por el checo Lukas Rosol. Desde entonces, se estuvo recuperando de dos lesiones. Una es en la rodilla izquierda, en la que sufre el síndrome de Hoffa, una inflamación de la zona de grasa situada detrás del tendón rotuliano y debajo de la rótula. La otra es una rotura parcial del  tendón rotuliano en esa misma rodilla. Por eso, el ex número uno del mundo tiene claro que la arcilla es la mejor superficie para su físico. "Para mí hoy en día jugar en tierra es un beneficio", contó el  español, que aseguró su presencia en el torneo mexicano de Acapulco, que se disputa del 25 de febrero al 2 de marzo. "Está claro que voy a jugar Acapulco. Llevo desde 2005 sin jugar  en la gira sudamericana. Lo voy a hacer porque creo que es el momento  adecuado y porque la rodilla me exige jugar en tierra", señaló. 

Nadal, ganador de 11 torneos del Grand Slam, también condicionó su  presencia en la Copa Davis con España al calendario y las superficies en las que tenga que jugar. "Yo estoy disponible para la Copa Davis siempre que no sean eliminatorias muy perjudiciales para mi rodilla. Los cambios de superficie drásticos son malos", admitió. 

Durante la larga entrevista, el tenista habló también de dopaje. "Es un tema sensible", admitió. "Yo soy el primero que quiero  controles antidopaje porque quiero estar cien por cien seguro de que el que está delante de mí está limpio, pero hay cosas que me parecen ridículas", advirtió. Para Nadal, que reveló que unos días antes fue despertado a las  6:25 de la mañana para un test, algunas prácticas en los controles antidoping "no son ni constitucionalmente aceptables". "Que para que hagas el test te tengas que levantar antes la camiseta, bajar los pantalones y dar una vuelta de 360 grados a mí ilusión no me hace. Me parece ridículo", sentenció.