Fútbol l Copa del Rey

El Racing golpea primero

  • Los de Marcelino toman ventaja gracias a Tchite y Smolarek

El Racing, con goles del africano Mohammed Tchite y del polaco Eusebiusz Smolarek, éste protestado por posible fuera de juego, dejó ayer, si no resuelta, sí al menos encarrilada la eliminatoria ante un Athletic que jugó al empate hasta que se adelantó el conjunto cántabro y que mostró sus carencias cuando trató de acortar distancias.

Los Campos de Sport de El Sardinero prácticamente se llenaron para ver el primer acto de una eliminatoria que el conjunto cántabro afronta con la esperanza de hacer historia y acceder a las semifinales de la Copa del Rey y el Athletic con la intención de redimirse en la competición que más gloria le ha dado.

En este mano a mano con visos de derbi, por la proximidad geográfica, salió con más ambición el Racing, que ya dispuso de una clara ocasión en el primer minuto de juego, cuando Tchite colgó un balón a Óscar Serrano para que éste se diera la vuelta y pusiera a prueba a Aranzubia con un tiro raso y ajustado.

Después de un primer cuarto de hora de claro dominio local, empezó a funcionar la presión del Athletic en todo el campo y, aunque no fue suficiente para que inquietara la portería del Racing, al menos sí lo fue para impedir la creación de juego de los hombres de Marcelino.

Tras el descanso, el juego transcurría con constantes interrupciones que favorecían al Athletic, que trataba de mantener el empate, como así se vislumbraba al sentar Joaquín Caparrós a Llorente para dar entrada a Garmendia.

Aun así, el Racing tuvo buenas ocasiones, primero al adelantarse Iván Bolado a Aranzubia, sin llegar a conectar con puntería; luego en un balón colgado desde la banda izquierda, que Oriol no remató bien pese a que el portero estaba fuera de sitio y, más tarde, en un disparo de Tchite que rozó el poste.

El Athletic, que en todo el segundo tiempo estaba jugando al 0-0, pagó su conservadurismo al encajar dos goles en apenas tres minutos. El primero de ellos llegó en una jugada de Colsa, quien pasó a Tchite para que éste peinara de cabeza fuera del alcance de Aranzubia.

No había tenido tiempo el Athletic de digerir el tanto cuando el Racing volvió a golpear con un gol de Smolarek, logrado en posible posición de fuera de juego, muy reclamada por los vascos.

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