"Esto es muy duro". Así justificó Míchel Salgado las lágrimas vertidas en su despedida del Real Madrid tras diez años en el club. "El Real Madrid era una parte muy importante de mi vida, pero lo iré asimilando".

Durante el mandato de Florentino Pérez, el equipo merengue siempre fue acusado de despedir a sus símbolos por la puerta de atrás. Sin embargo, esta vez aprendió de viejos errores y preparó con cuidado la despedida de un veterano como Salgado.

El club situó junto a él los 11 trofeos conquistados en la última década y tras la proyección de un vídeo con sus mejores momentos, Jorge Valdano, director general del Real Madrid, tomó la palabra. "Se va una gran persona, un gran profesional y uno de esos jugadores que dejan huella en el club".

Después tomó la palabra el jugador, quien apenas aguantó cinco minutos antes de que se le quebrara la voz. "El Real Madrid me lo ha dado todo tanto a nivel profesional como personal. Tengo tristeza, porque una despedida siempre es triste, pero también alegría, porque me siento orgulloso de todo lo que he logrado aquí".

Salgado se va del Real Madrid tras 371 partidos oficiales jugados con la camiseta blanca, pero el gallego tiene previsto seguir jugando "dos o tres años más al primer nivel". Se habla de una propuesta del Zaragoza por dos temporadas, aunque la preferencia del jugador es jugar en la Premier inglesa si llega una oferta interesante.