Como estaba previsto, ayer se produjo en Barcelona la reunión definitiva para cerrar el traspaso de Sergio García al Espanyol. A la misma asistieron Luis Oliver, consejero bético, Ramón Planas, director deportivo espanyolista, Mágico Díaz, agente de Sergio, y el propio jugador, que dejó cerrado su acuerdo para las próximas cinco temporadas. Y tras la marcha del delantero catalán, ahora todas las miras se centran en Achille Emana, el otro referente del equipo verdiblanco.

A falta de que el club haga oficial el traspaso, algo que se producirá hoy al ser festivo ayer en Sevilla, el Betis ingresará 1,8 millones de euros por Sergio, a lo que hay que sumar el dinero que éste deja de percibir de la pasada temporada más otros tres millones que el Espanyol pagará en dos años, precisamente la mitad de lo que el Betis aún adeuda al Zaragoza. Incluso el conjunto verdiblanco se guarda el 50% de la plusvalía de una futura venta. El deseo de Sergio de jugar en el Espanyol, lo que le ha llevado incluso a percibir menos dinero del que gana en el Betis, ha sido clave para cerrar la operación, que, sin ser rentable para el club bético, al menos sí sirve para paliar la situación económica a corto plazo.

Ahora la idea del Betis pasa por mantener a Emana, aunque el primer deseo de éste sea abandonar el club. El camerunés, a través de su abogado, conoce que el club verdiblanco sólo lo traspasará si llega una oferta importante e incluso el Betis colocó la cifra de ocho millones de euros como precio de partida. De momento, la persona de confianza de Emana carece de ofertas en firme encima de la mesa, aunque se espera que en las próximas horas sí pueda llegar alguna. Numerosos equipos han sondeado al entorno del jugador, aunque ninguno hasta ahora ha apostado fuerte por contratarlo. En el Betis se aceptaría traspasar a Emana, siempre y cuando la cantidad de dinero solventara la situación económica, ya que el deseo de Pepe Mel es contar con él.

Así, el propio entrenador bético ha mantenido conversaciones con Emana durante la concentración de La Manga para mostrarle su deseo de que lidere el equipo del ascenso. Incluso en el triangular de Benidorm lo señaló como capitán, en otro gesto para transmitirle confianza. El jugador no se muestra tan cerrado a la idea como la pasada temporada y sabe que sólo saldrá con una oferta importante encima de la mesa y así también se lo hizo saber a Mel.

Pese a todo, el técnico bético no las tiene todas consigo sobre la continuidad de Emana y se mantiene a la espera de lo que ocurra en los próximos días. Equipos como el Valencia siempre han mostrado interés en contar con el camerunés, con quien Unai Emery ha dialogado en alguna ocasión, y la mala pretemporada que está realizando el conjunto ché hasta el momento podría provocar que realizase una última ofensiva por su contratación. Además, desde el extranjero también ha existido interés, por lo que no sería descartable que pudiera llegar una oferta de última hora.

Emana no esconde a nadie que su deseo es salir del Betis, por aquello de competir en torneos de mayor categoría, pero también le ha asegurado a Mel que de seguir lo haría con la máxima implicación. El técnico lo quiere como su líder, pero sólo se quedaría si no llegase esa oferta que su entorno asegura que puede recibirse en las próximas horas.