El Real Madrid encadenó en Soria su sexto triunfo consecutivo en un partido en el que Raúl González alcanzó a Alfredo Di Stéfano como máximo goleador de la historia madridista, y en el que el Numancia mereció mucho más en una primera parte que gobernó claramente.

El Madrid no se topó con una meteorología tan adversa como estaba previsto, pero sí con un rival rocoso, dispuesto a medir la buena racha merengue sin concesión alguna. Y es que el Numancia empezó acometedor y no se agarró esta vez al catálogo futbolístico de su técnico, Sergio Kresic.

Los sorianos, correctos y bien colocados, jugaron con aplomo y con notable disciplina. Sus dos puntas, Gorka Brit y Goiria, pelearon mucho y bien, aunque fue Del Pino, con un testarazo al poste, el que pudo adelantar a los locales en el minuto 26.

El Numancia mereció inaugurar el marcador. Dominó el centro del campo con un Nagore portentoso y la calidad de Barkero, quien se asomó en varias ocasiones desde la izquierda, una banda que ayer desperdició el Real Madrid, pues Sneijder jugó centrado y el argentino Heinze no es lateral con recorrido alguno.

Dimas sacó bajo palos un remate de Heinze (minuto 34). Fue el único aviso serio del conjunto de Juande, que no llegaba con demasiada gente arriba. Raúl e Higuaín ni siquiera rondaron el gol en esta fase. Sin velocidad de balón, el equipo madrileño fue un atasco permanente.

La segunda parte comenzó con un dato histórico en forma de gol. Era el minuto 48 cuando Raúl aprovechó un rechace del guardameta Juan Pablo a remate de Higuaín y adelantó al Real Madrid. El capitán madridista estaba a un solo tanto de los 307 de Alfredo Di Stéfano, y desde anoche comparte con el actual presidente de honor del club la condición de máximo goleador de la historia blanca.

Ocho minutos después, una jugada individual de Robben acabó con un disparo del holandés y el segundo tanto madridista. Era una especie de déjà vu, ya que el ex jugador del Chelsea había arrancado desde la derecha y acabado la jugada con su zurda internándose hacia el centro. Ya ha metido tres goles muy similares esta misma temporada.

Después de dos guantazos en plena mandíbula, el Numancia intentó reaccionar, pero Casillas abortó un remate peligroso de Goiria. Juande Ramos debió ver el partido ganado ya porque retiró a Robben y el Madrid bajó el pistón tras su fugaz embestida. El partido no dio para mucho más. Sólo la expulsión de Gago dio algo de oxígeno a un voluntarioso Numancia que no fue el de la primera parte.