Fútbol l Liga de Campeones

Sólo tiene esta bala

  • El Barcelona se juega en Alemania el poco crédito que le queda después de sus tropiezos en Liga · Rijkaard recupera a su defensa de gala para la ida de cuartos

El Barcelona se enfrenta al Schalke 04, en partido correspondiente a la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, con diversos objetivos: el principal, recuperar algo de crédito con un buen resultado en medio de la aguda crisis de fútbol que vive el equipo c atalán.

El conjunto que entrena Frank Rijkaard se verá las caras con un rival claramente inferior en técnica, control del partido y movimiento del balón, pero superior en cuanto a coraje y mordiente como es el Schalke. Para contrarrestar este fútbol y esta dinámica en la que la entidad alemana pretende envolver el partido, con la colaboración inestimable de 60.000 fervientes seguidores que llenarán por completo el Veltins Arena, al Barça le queda un trabajo arduo para frenar las embestidas que sufrirá.

Rijkaard ha podido incorporar a la lista de convocados a dos de sus piezas básicas, pero que no estarán al cien por cien de sus capacidades. Se trata de Milito y Márquez, el dúo de centrales con el que el conjunto catalán mejor se ha encontrado pero al que, desgraciadamente para el Barça, apenas ha podido rentabilizar en los últimos meses por la lesión del mexicano.

Una vez recuperado del edema óseo, se espera que el mexicano pueda regresar al equipo titular, y por lo tanto el Barça podrá alinear a su defensa de gala: Puyol, Márquez, Milito y Abidal. No obstante, debido a la poca fiabilidad que pueda ofrecer el mexicano, y para atajar el juego por alto que se espera en el Schalke, no se descarta que Rijkaard alinee de entrada a Thuram, quien tiene como principal característica el juego aéreo.

Más difícil será descubrir antes del partido los planes que tiene el técnico para el centro del campo: si un equipo que mueva el balón e intente hacerse con el control de partido, o un grupo rocoso y nutrido de mimbres, donde jugadores como Gudjohnsen, Toure o Edmilson cobrarían tanta importancia como Xavi o Iniesta.

El desastre de Sevilla pesa mucho y los jugadores del Barcelona han salido muy tocados del nuevo tropiezo, que les ha dejado a siete puntos del Madrid y con la Liga casi inalcanzable a falta de ocho jornadas. El Barça se juega a un carta esta temporada y toda su apuesta pasa por la Liga de Campeones. Esta opción se presenta sin poder disponer Rijkaard de algunas de sus piezas básicas, como Ronaldinho, Deco o Messi.

El equipo que dirige Mirko Slomka, por su parte, no podrá disponer del croata Ivan Rakitic, que se lesionó en un tobillo durante un entrenamiento, mientras que tampoco estará en la convocatoria Jermaine Jones, por sanción. El uruguayo Gustavo Varela, con problemas de tiroides, tampoco podrá jugar.

El Schalke-Barca es el primer encuentro entre ambos conjuntos, mientras que para la entidad alemana, que cuenta con una Copa de la UEFA (1996-97), los cuartos de la Champions es el recorrido más exitoso que ha realizado nunca en la máxima competición.

El final de la temporada se acerca y sólo un buen resultado en Champions evitaría la debacle.

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