Un gol del burundés Tchite dio la victoria al Racing ante el Almería y acabó con la racha positiva del cuadro andaluz, que acabó con dos hombres menos, y de Diego Alves, que fue batido después de 667 minutos sin encajar un gol.

El resultado hizo justicia con lo visto en el terreno de juego, ya que el conjunto cántabro dispuso de muchas ocasiones, pero se topó con el acierto de Diego Alves.

Marcelino, como ya había anunciado, presentó un once inicial de gala sin reservar a nadie para el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey que disputará el Racing el jueves en Getafe, con el recuperado Munitis en el banquillo para darle unos minutos antes de ese trascendental encuentro copero. Por su parte, Unay Emery abandonó su habitual 4-1-4-1 para recurrir a un 4-4-2, con Negredo y Uche como hombres más adelantados.

Así comenzaba el duelo entre dos de los equipos revelación del campeonato, que a estas alturas de la Liga luchan por puestos de UEFA en lugar de por tratar de evitar el descenso, que era su objetivo para esta temporada.

En el primer minuto y medio de partido el Racing ya dispuso de dos clarísimas ocasiones, ambas de Tchite. Los cántabros dominaban y creaban peligro aprovechando la movilidad y velocidad del africano, que traía en jaque a Acasiete.

El Racing llegaba bien, pero no acaba de definir. Tras el descanso, con el Almería mejor asentado sobre el terreno de juego, Marcelino retiró al reaparecido Duscher, para dar entrada a Pablo Álvarez, que se situó en la banda para que Jorge López jugara junto a Colsa en el centro.

Cuando apenas llevaba cinco minutos en el campo, Pablo Álvarez dio un pase a Tchite y el burundés salió en carrera para batir con un certero disparo cruzado a Diego Alves en su salida desesperada. Pese a que el gol acabó con la racha de Alves, el portero brasileño fue el mejor de su equipo. A partir del gol el Racing jugó sus mejores minutos y pudo aumentar su ventaja.