La última jornada de la XIV edición de la Regata Internacional de Andalucía de remo estuvo marcada por una lluvia que deslució la prueba, aunque el agua no evitó que España se impusiera en la competición por equipos en el cómputo global de los dos días de competición, seguida de Gran Bretaña y Grecia.

Las tres victorias españolas, dos de ellas protagonizadas por los sevillanos Marcos Toral y Lourdes Guillén en los 500 metros, posibilitaron el triunfo hispano. Gran Bretaña sumó cuatro y Grecia hizo dos primeros, mientras que Suecia, Holanda y Rusia lograron sendos triunfos en féminas para maquillar así sus resultados. Especialmente disputadas fueron las pruebas de las distancia más cortas del programa, algunas de las cuales precisaron de la deliberación del jurado en el video-finish.

Fue el caso del triunfo de la prueba de la final de los 500 metros de skiff femenino en peso ligero, donde Lourdes Guillén aventajó sólo en 32 centésimas a la palista de Hong Kong Ka Man Lee, o en el LW2X, también sobre el medio kilómetro, en la que las holandesas Kirsten Van der Kolk y Marit Van Eupen superaron a las locales Mar Bosch y Sonia Boubeta por escasas 16 centésimas.

Más igualdad si cabe hubo en el scull masculino, que acabó con la ajustada victoria de Marcos Toral sobre el sueco Dennis Bernhardsson (13 centésimas) y en el doble scull masculino, en el que los griegos ganaron por solo tres centésimas. El último triunfo español de la jornada se produjo en el cuatro sin masculino, que llevó a España hasta los 186 puntos en la general, lejos del conjunto británico, que acabó la competición con 102.

En cuanto a los resultados de la VII Regata CTD por autonomías, Cataluña se impuso finalmente a Andalucía en una mano a mano que se decantó del lado de las catalanes merced a sus cinco victorias parciales frente a las dos andaluzas (en dos sin timonel cadete masculino y cuatro scull cadete femenino.

El mal tiempo arruinó todo el programa de actividades paralelas previstas para amenizar a un público se vio obligado a seguir la mayoría de las pruebas en las pantallas instaladas en el interior del edificio principal del Centros Especializado de Alto Rendimiento (CEAR) La Cartuja. Eso sí, los más entusiastas aguantaron el chaparrón para animar a pie de orilla a los suyos. La lluvia no sólo alteró la jornada deportiva, sino que obligar a la organización a improvisar la entrega de trofeos en el interior del CEAR, algo que se ha producido en contadas ocasiones en el historial de la cita internacional de febrero en el Guadalquivir, famosa por su buena climatología.