El Castilleja encara una nueva temporada en Primera Andaluza con la confianza del trabajo bien hecho el pasado año. El sexto puesto alcanzado ilusiona a una parroquia que quiere seguir progresando y soñando con un objetivo mayor, aunque el club mantiene los pies en el suelo para no desatar euforias que serían contraproducentes para el propio equipo.

De esta forma, el Castilleja se presenta como un candidato a estar en la zona noble de la clasificación, con la mentalidad puesta en no pasar apuros y consolidarse en posiciones cómodas. Tras la buena campaña, el equipo entrenado por Selu se ha reforzado con jugadores ofensivos dadas las carencias de cara a gol que tuvieron en algunos choques.

Jugadores como Orozco y Resumi darán más fortaleza a su zona más débil, dotando de mayor acierto anotador a un equipo caracterizado por su buen grupo y la presión de su afición.

Con algunos juveniles subidos al primer equipo, Selu tiene una plantilla muy equilibrada, tal y como pudo verse en las citas que el Castilleja jugó durante esta pretemporada. Dos empates a tres tantos con Sanlúcar y Camino Viejo a domicilio dejaron buenas sensaciones, mientras que después llegaron los triunfos antes el Camas (1-4), Baena (2-1) e Ibarburu (5-3), para finalizar con una derrota ante el fuerte Coria (1-2).

Pensar en el ascenso debe ser una utopía para un equipo poco acostumbrado a conocer la presión de luchar por lo máximo, por lo que la paciencia debe ser primordial para no caer.

Uno de los objetivos claros es la búsqueda de esa regularidad que ya logró la pasada temporada, aunque esta vez el bloque parece más conjuntado que nunca y sus principales jugadores no se han movido del club.

Dani Lara seguirá siendo uno de los grandes referentes del plantel. El interior diestro será el gran peligro para los rivales del Castilleja por su indiscutible calidad y su facilidad para surtir de balones a los delanteros.

Resumi, llegado de Los Palacios, debe aportar mejores números goleadores al equipo, que no contó el año pasado con grandes especialistas.

El estadio Antonio Almendro debe ser un factor más para creer en un equipo que ilusiona a ritmo vertiginoso tras su buena campaña el año pasado. La afición confiará en el buen hacer de Selu, que a sus 49 años cumple su cuarta temporada al frente del Castilleja con la energía suficiente para mantener al equipo entre los mejores y pelear por sueños no tan lejanos. La temporada irá decidiendo qué aspiraciones deben tenerse en cuenta, aunque a priori el sistema construido deja buenos augurios sobre el futuro del Castilleja en la categoría.