"Tenemos ganas de revancha deportiva con el Sevilla". Esta frase de Unai Emery recoge el ambiente que se va a encontrar el equipo de Marcelino García Toral la noche del 5 de enero en Mestalla. En Valencia esperan encorajinados al Sevilla, por varios factores, entre los que el técnico guipuzcoano recordó no sólo el precedente liguero de esta temporada, sino el cruce de cuartos de final de 2009.

Últimamente, los Sevilla-Valencia, o Valencia-Sevilla, se han convertido en partidos de alto voltaje, pues se trata de los dos equipos que más han competido por ser el campeón de los otros en las últimas temporadas. En una clasificación liguera hipotética de 2011 el Valencia es tercero y el Sevilla, cuarto. Los de Mestalla les ganan la mano por ahora a los de Nervión y, además, su entrenador reconoció que hay pique.

"Para nosotros, la eliminatoria tiene un componente especial por los últimos partidos. Esta misma temporada perdimos en el Sánchez-Pizjuán cuando teníamos en nuestras manos lograr al menos un empate", dijo Emery recordando aquel épico 1-0 con tres expulsados y penalti fallado por Ever Banega con 1-0 y el Sevilla ya con nueve jugadores. No queda ahí su rencor deportivo: "Todavía recuerdo cómo nos eliminaron injustamente de los cuartos de la Copa en mi primera temporada aquí". Se refiere a aquel 2-1 en Nervión con gol de Squillaci tras un rebote con el tiempo cumplido.

La eliminatoria promete emociones muy fuertes y en el Sevilla abogan por que Nervión, en el que será el primer partido fuera de abono de la temporada -el club sacará los precios tras la ida-, juegue un papel importante. "Hay que agarrarse a nuestra competitividad en esta competición, a la vuelta en el Pizjuán, que siempre puede ser muy importante, y a partir de ahí, es una eliminatoria muy igualada en la que quizás ellos sean un pelín más favoritos, por el momento de forma que atraviesan. Que esa competitividad nos lleve a dar un paso más adelante", dijo Víctor Orta, secretario técnico y representante del Sevilla en el sorteo.