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Los seis detenidos por los incidentes quedan libres

  • Cuatro son hinchas del Betis y los otros dos gallegos, a los que se imputan desórdenes

Los seis jóvenes detenidos por los incidentes producidos en las inmediaciones del estadio de Heliópolis, antes del inicio del partido entre el Betis y el Deportivo, quedaron ayer en libertad pero con cargos después de prestar declaración en el juzgado de guardia.

El violento enfrentamiento que mantuvieron los seguidores radicales de ambos clubes se saldó inicialmente con el arresto de cuatro jóvenes, pero con posterioridad la Policía practicó dos nuevas detenciones. Los detenidos, cuatro de ellos aficionados del Betis y los otros dos del equipo gallego, han sido imputados por delitos de desórdenes públicos y lesiones, en relación con las agresiones y la quema de dos vehículos y varios contenedores de basura.

Como resultado de la pelea, que se inició sobre las seis y media de la tarde del sábado, al menos cuatro personas resultaron heridas, por lo que tuvieron que recibir asistencia sanitaria. En la agresión, que tuvo lugar en las inmediaciones del estadio verdiblanco, entre las calles Tajo y Padre García Tejero, algunos de los jóvenes llegaron a emplear hasta bates de béisbol, según confirmaron fuentes policiales.

Una de las personas heridas es un joven que fue atropellado al cruzarse con un vehículo de la Policía que se acercó hasta el lugar, alertado por los incidentes.

Los seis detenidos fueron puestos ayer a disposición del juez de guardia, tras haber pasado la noche en los calabozos y una vez que la Policía Nacional finalizó la instrucción de las oportunas diligencias. Uno a uno, los aficionados fueron prestando declaración ante el juez, que al final decidió su puesta en libertad provisional aunque siguen imputados y serán juzgados por delitos de desórdenes públicos y lesiones.

La reyerta del sábado no es la primera que se produce entre los Supporters béticos y los Riazor Blues, puesto que ya durante el partido correspondiente a la primera vuelta del campeonato, disputado en La Coruña, se registraron algunos problemas entre ambos grupos radicales. En aquella ocasión, los altercados no trascendieron a la opinión pública porque el enfrentamiento no adquirió la gravedad del que protagonizaron ahora junto al estadio de Heliópolis.

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