Es posible y hay que jugar cada partido como si fuera el último. Ésa es la consigna que el entorno y el cuerpo técnico quieren transmitir a los jugadores y a la afición del Sevilla con el objetivo de reeditar la participación en la Liga de Campeones la próxima temporada. Quedan siete jornadas y hay tres equipos destacados en esa pugna, Atlético, Racing y Sevilla, y ni siquiera la ventaja que saca actualmente el equipo rojiblanco de cinco puntos -seis si se cuenta el goal average particular- amilana al presidente del club de Nervión, que ayer puso el ejemplo de la gran remontada que protagonizó el Sevilla de Joaquín Caparrós precisamente con el Atlético en la campaña 03-04.

Aquel gol de Julio Baptista a Osasuna que se celebró por todo lo alto por el equipo y los aficionados llegó tras un gran sprint final que el Sevilla ganó al Atlético opr la sexta plaza. El premio era la Copa de la UEFA. "Hace cuatro años estábamos a siete puntos del Atlético de Madrid a estas alturas y lo acabamos dejando fuera de la UEFA. Dios quiera que, cambiando de competición y puntuación, nos encontremos en la misma situación, ya que en la Liga de tres puntos una ventaja de cinco no es ventaja cuando quedan tantos puntos en juego".

Entonces, a estas alturas de la temporada eran siete los puntos con los que el Atlético aventajaba a los hispalenses. En aquella temporada, a siete jornadas para el final, los colchoneros eran quintos y aventajaban a los sevillistas en siete puntos. Pero el equipo de Joaquín Caparrós realizó un gran tramo final de campeonato y sumó 14 puntos, por sólo 7 del equipo entonces entrenado por Gregorio Manzano. De esa forma, el Sevilla terminó sexto y volvió a Europa después de nueve años.

Esta temporada la diferencia es de un punto menos, si se tiene en cuenta que el Atlético venció en su casa y hace tres jornadas en el Sánchez-Pizjuán. De ahí que el presidente, durante el almuerzo de Feria con el Sevilla Atlético en la caseta de la Peña Sevillista Al Relente, recordase en la radio del club el dato de 2004 como claro referente para las siete finales que quedan.

No sólo eso, sino que reconoció, una vez más, que el lograr el objetivo de la Champions o no marcará la inversión del curso próximo: "Si conseguimos la Liga de Campeones, volveremos a hacer una plantilla intentando que sea tan potente como la de este año, aunque es muy difícil que volvamos a tener una plantilla tan compensadísima como la de esta temporada, y si el Sevilla es de UEFA, la inversión será menor porque nos movemos por un balance, y la primera obligación del consejo de administración es equilibrar el balance".

Además, a favor del Sevilla juega el golpe de timón de Manolo Jiménez ante el Villarreal y la confianza y la moral del equipo por la victoria. "Volvimos a ser un Sevilla fácil en el juego -dijo Del Nido-, poderoso en el plano físico, creador de innumerables ocasiones de gol, vimos a un equipo que recuperó esa consistencia en su fútbol, que estuvo tremendamente compensado y que no sólo apabulló y avasalló al Villarreal, sino que además evitó que el Villarreal creara ocasiones", dijo. Por todo ello, insistió: "Hay que pensar en Mallorca, Mallorca y Mallorca. Seguro que vamos a tener oportunidades y si el Sevilla es capaz de mantener el nivel del domingo partido a partido, seguro que vamos a ir recortando distancias".