Deportes

El 'invisible' Turan necesita despertar

  • El jugador del Barcelona fue uno de los principales señalados después de que Turquía cayera el domingo 1-0 ante Croacia en su debut en el torneo.

Entre viñedos, hoyos de golf y aire limpio, Arda Turan busca reencontrarse a sí mismo para poder liderar la reacción de la selección turca de fútbol en la Eurocopa de Francia.

El jugador del Barcelona fue uno de los principales señalados después de que Turquía cayera el domingo 1-0 ante Croacia en su debut en el torneo. Un partido gris, sin brillo, que obliga a los turcos a despertar el viernes en Niza ante el peor rival posible, España. "Nuestras estrellas fueron invisibles", criticó el diario turco Fanatik tras el partido ante Croacia. Una frase dirigida a Turan y Hakan Calhanoglu, los jugadores llamados a comandar a la selección otomana.

No fue el inicio de Eurocopa que esperaba Turan tras vivir una primera temporada en el Barcelona muy dura en el plano personal. Sin poder jugar hasta enero por una sanción de la FIFA al club azulgrana, el atacante no encontró ni continuidad ni ritmo ni magia en la segunda parte del año. Su lugar más habitual fue el banquillo. Así, toda la presión y responsabilidad que no había tenido en el Barcelona le llegó de golpe con Turquía. En el duelo ante Croacia fue sustituido en el minuto 65 y se sintió responsable por el destino de su equipo.  "No he jugado bien, pero mis compañeros han luchado. Pido perdón al pueblo turco", se disculpó el jugador de 29 años. "Tenemos que estar unidos. Hemos jugado bien, pero en ocasiones son las individualidades las que marcan la diferencia. Espero que contra España juguemos mejor y que podamos ganar".

El seleccionador turco, Fatih Terim, mimó a Turan en las horas previas al duelo con Croacia. "Arda es muy importante para nosotros. No importa si juega o no, aquí es nuestro jugador más importante. Va a mejorar. Siempre está en mi equipo ideal", dijo el día antes del partido. Sin embargo, Terim sustituyó al jugador mediada la segunda parte y después le exigió más a él y a Calhanoglu: "Son dos jugadores importantes, había puestas muchas expectativas en ellos, pero no dieron lo suficiente. Hay jóvenes que también deben dar más porque tenemos puestas muchas expectativas sobre ellos. Si mejoran, podemos pasar de ronda".

El ex árbitro turco Erman Toroglu, en su columna para el periódico Sabah, disparó con bala hacia Turan tras la derrota: "Agotó sus fuerzas en la grabación de anuncios y fue el freno de mano de Turquía". Y a las críticas se sumó incluso el presidente del Fenerbahce, uno de los clubes más importantes del país, Aziz Yildirim, que cargó contra todos. "Si hay responsables de la derrota son el equipo técnico, los jugadores y la federación. Si son los señalados por los triunfos también deberían tomar la responsabilidad después de las derrotas", señaló, uniéndose a la ola de críticas en el país.

Sin embargo, nada de esa presión externa que pesa sobre Turquía antes del duelo ante España se respira en la localidad de Saint-Cyr-sur-Mer, donde el equipo de Terim instaló su campamento base durante la Eurocopa. En el pequeño pueblo bañado por el Mar Mediterráneo, en la Costa Azul, todo es paz. El hotel de Turquía, situado en la montaña, está rodeado de campos de golf, viñedos, pinares y mucha tranquilidad. Apenas se escucha el ruido de los casi silenciosos carros de golf. Por no haber no hay ni nubes. En ese bucólico entorno prepara Turquía el duelo ante España, en el que espera que Turan despierte y agite su varita mágica como lo hacía en el Atlético de Madrid.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios