Es muy tentador hacer algún tipo de referencia al Domingo de Resurrección para hablar del partido que hoy (19:00) disputará el Aceitunas Fragata Morón en el pabellón O Pombal de Pontevedra ante el Xuven Cambados. Cualquier alusión al respecto valdría para ambos conjuntos, pues se juegan muchísimo.

Así lo cree Rafa Rufián, entrenador del Morón, que sabe que las aspiraciones de su equipo, que pasan por clasificarse para el play off de ascenso a LEB Oro, se volverán a poner a prueba en tierras gallegas. Por su parte, el Cambados deberá pelear una jornada más para intentar salvar la categoría.

Los dos equipos llegan con bajas, quizá más tocados los locales, pero ambos tienen mucho que echar de menos. En el caso del Cambados, porque sus mejores jugadores se han ido marchando rumbo a la LEB Oro, con lo que su capacidad ofensiva se ha visto muy mermada.

No obstante, en el plantel aún figuran grandes jugadores. Su mayor peligro pasa por las manos de Samuel Barros, Juan Martín Orellano y Carlos Poyatos. Además, tienen el plus de jugar en casa.

El Morón emprende su largo viaje con la intención de superar la ausencia de Conde y, sobre todo, de conseguir una victoria que certificaría el objetivo del club en esta temporada con vistas a afrontar con algo más de seguridad los tres choques que restarían: Agustinos Leclerc en casa, viaje a Ávila y retorno a la Alameda para verse las caras con un rival directo como es el Básket Navarra.

Para vencer en Cambados, la clave pasa, como siempre, por mantener la intensidad defensiva que, salvo en el partido contra el Real Canoe, el equipo ha sabido conservar. El hecho de que Cambados comparezca como local iguala las posibilidades del choque, que, en cualquier caso, será muy emocionante. No será para menos teniendo en cuenta las aspiraciones de ambos contendientes.