Después de semanas convulsas, con la inquietud que generó la negativa racha de resultados, las dos victorias consecutivas en la Liga, ante Valencia y Atlético, han cambiado el panorama del Betis. Ayer, en el tradicional almuerzo de Navidad celebrado en el Gol Norte del Benito Villamarín, la concordia y el buen ambiente fueron la nota predominante en una comida que permitió escenas entrañables, donde se mezclaron los jóvenes de los escalafones inferiores con los del primer equipo en unas mesas que se bautizaron con nombres históricos para la entidad. Desde Unamuno a Oliveira, pasando por Edu, Joaquín, Peral, Lecue, Aedo, Areso o Esnaola, estuvieron presentes en un almuerzo con casi 500 comensales, en el que el presidente, Miguel Guillén, lanzó un mensaje tanto a los canteranos como a los jugadores de la primera plantilla.

"Hablo en nombre del consejo de administración, que somos la parte más visible de esta gran familia bética que la componen más de un millón de personas. Nos representan unos valores que son el trabajo, el esfuerzo, la honradez, la humildad y la capacidad de superación. Son divisas que nos hacen diferentes a los demás. Debemos exigirnos el máximo, ya que representamos a miles de personas que nos piden dar todo lo que llevamos dentro. Queremos compartir nuestros éxitos deportivos con ellos. Estamos orgullosos de los escalafones inferiores, tienen las puertas abiertas de nuestro proyecto de par en par", comenzó el presidente, antes de referirse a la trayectoria del primer equipo: "A los futbolistas del primer equipo tengo que decirles que son muy buenos, que están en Primera División por méritos propios. Habéis atravesado una mala racha y aun así estáis colocados en el undécimo puesto de la mejor Liga del mundo. Le habéis ganado al Athletic, al Valencia, al Atlético, que son grandes equipos. Le volveréis a ganar al Barcelona, le ganaréis al Sevilla. Quiero dar las gracias a todos vosotros por formar parte de la familia bética. Feliz Navidad para todos".

Con anterioridad, Guillén junto a Rafael Gordillo y José Antonio Bosch, visitó el Hospital Virgen Macarena, como por la tarde el Virgen del Rocío, y allí el presidente de la Fundación también expresó su opinión sobre la actualidad verdiblanca. "Siempre que se gana se está alegre, aunque las derrotas también sirven para aprender. Los béticos esta Navidad estarán más contentos. Al nuevo año sólo le pido que nos quedemos en la categoría, nos da igual el puesto, pero que nos quedemos", señaló Gordillo.

Los dos triunfos ligueros han devuelto la alegría al club verdiblanco, aunque ayer entre los jugadores se apuntaba a la remontada en la Copa del Rey para ponerle un buen broche al final de año. El almuerzo de Navidad del Betis, en el que también estuvieron presentes los tres administradores concursales, coincidió con la vuelta a la calma de la situación deportiva y la recuperada alegría del beticismo.