Tenis

El rey de París quiere conquistar Londres

  • Nadal comienza a jugar el torneo de Queen's para preparar el asalto a Wimbledon, donde Federer buscará su venganza

Vestido con zapatillas rojas, tejanos azules y una camiseta blanca con cuello, Rafa Nadal reflejaba en su rostro la falta de sueño tras una noche inolvidable. Aunque le hubiera gustado festejar más.

"Ojalá pudiese haber habido más fiesta, pero el martes ya estoy compitiendo de nuevo, así que no pude festejar tanto como hubiera deseado. Y eso que estuve hasta la medianoche atendiendo a la prensa", explicó el manacorí rodeado de una nube de fotógrafos y curiosos en el puente de Alejandro III, magnífica escenografía en el primer día a pleno sol tras medio mes de nubes grises y días fríos en Roland Garros.

Tras obsequiarle a Federer la peor derrota de su carrera, Nadal compartió junto a 40 personas una cena en el Café del Homme, en los jardines del Trocadero, y luego la noche se extendió hasta el amanecer en Vip, un exclusivo club nocturno en un sótano de Champs Elysees.

En parte por eso llegó Nadal tarde a su cita con los medios de comunicación, a la que se presentó caminando, casi como si no fuera el hombre del día. "Nadal, cuatro títulos; Federer, cuatro juegos", resumía L'Equipe el 6-1, 6-3 y 6-0 la victoria la victoria del mallorquín sobre el número uno del mundo, un resultado para la historia grande del tenis. "Supongo que ya me daré cuenta con el tiempo de lo que significa eso. Los números son importantes, sí, pero lo que más importa es ganar el título", sintetizó con pragmatismo el jugador, que cumplió con un rito que mezcla lo deportivo y el marketing: tachar con un rotulador en su camiseta el años 2008, que se suma a los 2005, 2006 y 2007 ya tachados, símbolo de su hegemonía en París.

Pero no hay tiempo que perder. La competición continúa y el tenista balear ya está en el exclusivo club que alberga el torneo de Queen's a para entrenarse. Nadal no para, porque no quiere, y porque el circuito no se lo permite. "Juego el martes dobles y el miércoles individuales", apuntó el español, que sigue saboreando el triunfo que esperó todo el año: "En el fútbol ganas la Champions y tienes todo el verano para disfrutarlo. Nosotros en cambio en dos semanas tenemos otro gran torneo". Y es que Wimbledon, el torneo en el que ha sido finalista los dos últimos años, se convierte en su principal objetivo ahora y el escenario en el que Federer buscará un histórico récord de seis títulos consecutivos, aunque la duda está abierta: ¿podrá el suizo recuperarse psicológicamente del mazazo de París? "Es un torneo muy complicado. Ojalá pudiera jugar otra final con Federer, aunque allí es casi invulnerable", pero sólo de momento.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios